.
1. Televisión Española emitió su primer contenido publicitario en 1957. Patrocinando uno de los primeros programas de la historia, un presentador se refirió a las virtudes del refrigerador Super 57 y la lavadora Launtromat de la marca Westinghouse. Hoy, cincuenta y dos años después, Televisión Española emitirá el último anuncio publicitario de su historia, dedicado a la tarjeta de crédito MasterCard. Entre uno y otro hemos podido ver casi un millón cuatrocientos mil consejos publicitarios. Ningún otro agente social, -ni la familia, ni la escuela, ni la iglesia, ni la policía-, nos ha dicho tantas veces lo que teníamos que hacer. Más que de cualquiera de los otros elementos antes citados, el individuo actual es fruto de la publicidad comercial, la vía de socialización y adoctrinamiento que en el siglo XX reemplazó a la propaganda religiosa. El principal enemigo de Martínez Camino no es Zapatero: fue Westinghouse y ahora es MasterCard. Los crucifijos no han sido sustituidos por el puño y la rosa, sino por la "M" de McDonalds.
2. Con la desaparición de la publicidad en la televisión pública quedan libres varias horas de programación al día que deberán ser ocupadas por nuevos contenidos. Desde aquí hacemos una propuesta que creemos incontestable: TVE debe compensar el fin de los anuncios mediante la emisión de "Mad men", la serie norteamericana que lleva tres temporadas retratando con crueldad de psicópata la vida en una empresa de publicidad de comienzos de los años 60. La publicidad ha creado el nuevo mundo y los mad men de la serie fueron los primeros en hacerlo. Así la publicidad seguiría presente en TVE a pesar de que TVE ya no esté emitiendo publicidad.
3. Vestido de fiesta para la Nochevieja: 165 euros. Taxi hasta la casa de unos amigos: 7,40 euros. Botella de vino de rioja gran reserva con denominación de origen: 32 euros. Racimo de uvas: 0,90 euros. Sentarse delante del televisor a las 23:45 horas, sintonizar La 1 y contemplar el último anuncio de la historia de la televisión pública: no tiene precio.
31/12/09
30/12/09
CONTRA EL CANIBALISMO, CLARO
Puestos a simplificar, simplifiquemos con estilo. Hay dos clases de personas, los que creen que los programas de tarot en directo son una estafa graciosa y los que creemos que son una estafa sin maldita la gracia. Los que creen que “CSI” o “Los Simpson” ya llevan demasiado tiempo con nosotros y los que creemos que quienes llevan demasiado tiempo en nuestras vidas son Mercedes Milá o Jorge Javier Vázquez, no Horatio o Homer. Los que creen que programas como “Tal cual lo contamos” sólo son un reflejo del mundo en que vivimos y los que creemos que sólo son una prueba más de que Dios no existe ni de broma. Los que creen que “Fiebre Maldini” es “El Bulli” de los programas futboleros y los que creemos que es un sabroso plato del día (postre, pan y vino incluidos) en el restaurante de la esquina. Hay dos clases de personas, los que no ven “¡Qué bello es vivir!” todas las navidades y los que creemos que si no fuera por “¡Qué bello es vivir!” la programación televisiva navideña sería una estafa graciosa, algo que lleva demasiado tiempo con nosotros, el reflejo del mundo en que vivimos y “El Bulli” del mundo audiovisual.
Puede que la televisión navideña sea una estafa sin gracia, pero no hace tanto daño como “Sálvame diario”. Puede que la televisión navideña sólo sea una prueba más de que Dios no existe ni de broma, pero también tiene el aroma del plato del día en el restaurante de la esquina. Puede que “¡Qué bello es vivir!” esté tan pasada de moda como ver a Pepe Isbert buscando a Chencho en la Plaza Mayor de Madrid, pero no importa. Con películas como “¡Qué bello es vivir!” a algunos nos pasa lo mismo que a Jorge Luis Borges con el canibalismo, pero al revés. Borges decía que no estaba a favor del canibalismo, claro, pero que no podía pasar mucho tiempo hablando de ello. Algunos estamos a favor de “¡Qué bello es vivir!”, claro, pero no podemos pasar mucho tiempo hablando de ello porque sería como explicar un chiste después de haberlo contado. Sólo diré que es posible vivir sin “¡Qué bello es vivir!”, claro, pero es una vida peor.
James Stewart hace que queramos ser mejores personas. De acuerdo, no es más que una simplificación, pero una simplificación con estilo.
29/12/09
DEJADLES SOLOS
Telecinco estrenó recientemente "Dejadnos solos", un nuevo reality infantil en donde ocho niños y ocho niñas conviven en dos casas separadas sin la presencia de adultos. "Dejadnos solos" tiene un único fallo: que no les están dejando solos. Mejor dicho, "Dejadnos solos" tiene tres únicos fallos: que a los niños no les han dejado solos en el pasado, que a los niños no les están dejando solos en el presente, y que a los niños no les van a dejar solos en el futuro.
¿Les han dejado solos a los niños en el pasado? María, 11 años, habla para el programa y asegura ser "supercoqueta", "incapaz de salir a la calle sin mis maquillajes y mis complementos", declarando después que de mayor quisiera ser "bailarina o actriz". No parece el testimonio de una niña a la que la hayan dejado sola anteriormente, sino el de una preadolescente a la que llevan muchos años aplastándole la cara contra un televisor que emite basura sexista. ¿Les están dejando solos a los niños en el presente? La cámara se mueve todo el rato su alrededor, acercándose y alejándose como nunca hemos visto en "Gran Hermano", de una forma que sólo es explicable por la presencia física de un técnico que lleva el objetivo al hombro y está actuando en la situación como cualquiera de los demás niños. No pueden ser sinceros los mimos que le entran a Álex, 10 años, porque echa de menos a su familia cuando hay un cámara filmando su cara de tristeza a menos de dos metros de distancia. ¿Les van a dejar solos a los niños en el futuro? Ariadna, 11 años, dice que no quiere crecer nunca, pero todos sabemos que este mundo de los realities termina convirtiéndose siempre en un almacén de juguetes rotos, y que hay que ser muy ingenuo para creer que un onceañero pueda ser carne de este negocio sin llenarse la cabeza de pensamientos extravagantes y tener que pagar facturas durante bastante tiempo después.
Sería estupendo que dejáramos solos a los niños de "Dejadnos solos". Se acabaría el programa y ellos y nosotros podríamos dejar de darnos el coñazo mutuamente.
¿Les han dejado solos a los niños en el pasado? María, 11 años, habla para el programa y asegura ser "supercoqueta", "incapaz de salir a la calle sin mis maquillajes y mis complementos", declarando después que de mayor quisiera ser "bailarina o actriz". No parece el testimonio de una niña a la que la hayan dejado sola anteriormente, sino el de una preadolescente a la que llevan muchos años aplastándole la cara contra un televisor que emite basura sexista. ¿Les están dejando solos a los niños en el presente? La cámara se mueve todo el rato su alrededor, acercándose y alejándose como nunca hemos visto en "Gran Hermano", de una forma que sólo es explicable por la presencia física de un técnico que lleva el objetivo al hombro y está actuando en la situación como cualquiera de los demás niños. No pueden ser sinceros los mimos que le entran a Álex, 10 años, porque echa de menos a su familia cuando hay un cámara filmando su cara de tristeza a menos de dos metros de distancia. ¿Les van a dejar solos a los niños en el futuro? Ariadna, 11 años, dice que no quiere crecer nunca, pero todos sabemos que este mundo de los realities termina convirtiéndose siempre en un almacén de juguetes rotos, y que hay que ser muy ingenuo para creer que un onceañero pueda ser carne de este negocio sin llenarse la cabeza de pensamientos extravagantes y tener que pagar facturas durante bastante tiempo después.
Sería estupendo que dejáramos solos a los niños de "Dejadnos solos". Se acabaría el programa y ellos y nosotros podríamos dejar de darnos el coñazo mutuamente.
28/12/09
CONVALECENCIAS Y VILLANCICOS
El médico le ha prohibido a María Antonia Iglesias participar en los debates políticos de "La Noria". "¿Qué me dice del tabaco, doctor?". "Ni olerlo". "¿Sexo?". "Ad libitum". "¿Y de los debates de ‘La Noria’? ¿Puedo volver a recordarle a Miguel Ángel Rodríguez lo de la guerra de Irak a la menor ocasión?". "Ni lo sueñe, eso sí que se ha acabado para usted. Le prohíbo terminantemente que se acerque siquiera a esa mesa". "Jooo, doctor, ¿ni un poquito, ni una vez al mes? ¿Ni para discutir temas menores? Bah... algo de política autonómica.... la ley del tabaco... ¿ni una agarradita pequeña con Montserrat Nebrera sobre la cumbre de Copenhague?".
Y no queda claro si la prohibición está motivada por algo inherente a Iglesias o a "La Noria". ¿Es MAI especialmente sensible a las discusiones? ¿A la intensa ex-polemista se le han retirado igualmente las reuniones de la comunidad de vecinos, los viajes por la M-30 en hora punta y la cena de Nochevieja?. ¿O son los debates políticos de "La Noria" intrínsecamente tóxicos? ¿La sanidad pública debería actuar de oficio para desaconsejar la participación en tales performances a Pilar Rahola (sí, por favor), a Isabel Durán (sí, por favor, por favor), a Enric Sopena (¡sí, por Dios!) o Alfonso Rojo (¡¡sí, por Dios, por favor, por lo sea, sí, sí, tengan piedad de nosotros!!). ¿Habría que denunciar a Jordi González ante el Colegio Oficial de Presentadores acusado de "inducción al trastorno cardíaco por moderación malintencionada de debates políticos"?.
Al final la medicina y la televisión están más cerca de lo que parece. Un buen amigo que trabaja en un Centro de Salud cercano me comentó que la noche del sábado ingresaron en Urgencias muchos más pacientes de lo habitual aquejados de todo tipo de dolencias. Tenían en común haber visto a Falete cantar a MAI un villancico bajo la mirada eunuca de Nieves Herrero y María Teresa Campos. Gracias a los médicos que prohíben a las estrellas de la telebasura continuar con su trabajo. A lo mejor no lo hacen pensando en su salud, sino en la nuestra.
Y no queda claro si la prohibición está motivada por algo inherente a Iglesias o a "La Noria". ¿Es MAI especialmente sensible a las discusiones? ¿A la intensa ex-polemista se le han retirado igualmente las reuniones de la comunidad de vecinos, los viajes por la M-30 en hora punta y la cena de Nochevieja?. ¿O son los debates políticos de "La Noria" intrínsecamente tóxicos? ¿La sanidad pública debería actuar de oficio para desaconsejar la participación en tales performances a Pilar Rahola (sí, por favor), a Isabel Durán (sí, por favor, por favor), a Enric Sopena (¡sí, por Dios!) o Alfonso Rojo (¡¡sí, por Dios, por favor, por lo sea, sí, sí, tengan piedad de nosotros!!). ¿Habría que denunciar a Jordi González ante el Colegio Oficial de Presentadores acusado de "inducción al trastorno cardíaco por moderación malintencionada de debates políticos"?.
Al final la medicina y la televisión están más cerca de lo que parece. Un buen amigo que trabaja en un Centro de Salud cercano me comentó que la noche del sábado ingresaron en Urgencias muchos más pacientes de lo habitual aquejados de todo tipo de dolencias. Tenían en común haber visto a Falete cantar a MAI un villancico bajo la mirada eunuca de Nieves Herrero y María Teresa Campos. Gracias a los médicos que prohíben a las estrellas de la telebasura continuar con su trabajo. A lo mejor no lo hacen pensando en su salud, sino en la nuestra.
27/12/09
EL DÍA DE LOS INOCENTES
El día de los inocentes era más divertido cuando se celebraba el 28 de diciembre. Como todo el mundo sabía que era el día de las inocentadas resultaba más difícil colarla y se disfrutaba más. Ahora se recurre a lo fácil, a gastar las bromas días antes, pero así cuela todo y no tiene mérito.
Por ejemplo, Samanta Villar, la chica de Cuatro que vive durante 21 días las situaciones más extremas, se despidió el otro día anunciando el contenido del próximo programa con estas palabras: “Como no es lo mismo contarlo que vivirlo, voy a hacer porno durante 21 días”. Qué simpática, nos quiere hacer creer que en vez de pasar las navidades en familia se las va a pasar haciendo porno: tres semanas de noche de amor que no van a ser a la vez noche de paz como pasa en el villancico. No cuela, Samanta.
También lo intentó un jefazo de laSexta diciendo que estaba deseando que la ley prohibiera los concursos de call TV para poder dejar de emitirlos; pero es que, claro, mientras tanto los siguen emitiendo porque dan dinero. Qué cachondo, el tío. Igual que nuestros legisladores que dicen que primero prepararon una Ley Audiovisual que prohibía emitir juegos de azar en horario infantil y cuando llega el sorteo del día 22 la cambian porque tienen miedo de que los niños se queden sin la cantinela del sorteo de Navidad. Por Dios, una broma tan pesada no se la cree nadie.
Pero eso no es nada al lado de la inocentada que están intentando gastarnos estos días las grandes cadenas de televisión: después de pasarnos años creando cadenas nuevas para aumentar el pluralismo y esas cosas, ahora se quieren quedar con nosotros haciéndonos creer que se van a fusionar para que cuatro gatos (bueno, dos) manejen el cotarro. Y para aumentar el pitorreo dicen que se juntan Antena 3 y laSexta por un lado, y Telecinco y Cuatro por otro. Fíjate qué gracia que así empatan sumando nueve. A otro perro con ese hueso, que no somos tontos y el día de los inocentes es mañana.
Por ejemplo, Samanta Villar, la chica de Cuatro que vive durante 21 días las situaciones más extremas, se despidió el otro día anunciando el contenido del próximo programa con estas palabras: “Como no es lo mismo contarlo que vivirlo, voy a hacer porno durante 21 días”. Qué simpática, nos quiere hacer creer que en vez de pasar las navidades en familia se las va a pasar haciendo porno: tres semanas de noche de amor que no van a ser a la vez noche de paz como pasa en el villancico. No cuela, Samanta.
También lo intentó un jefazo de laSexta diciendo que estaba deseando que la ley prohibiera los concursos de call TV para poder dejar de emitirlos; pero es que, claro, mientras tanto los siguen emitiendo porque dan dinero. Qué cachondo, el tío. Igual que nuestros legisladores que dicen que primero prepararon una Ley Audiovisual que prohibía emitir juegos de azar en horario infantil y cuando llega el sorteo del día 22 la cambian porque tienen miedo de que los niños se queden sin la cantinela del sorteo de Navidad. Por Dios, una broma tan pesada no se la cree nadie.
Pero eso no es nada al lado de la inocentada que están intentando gastarnos estos días las grandes cadenas de televisión: después de pasarnos años creando cadenas nuevas para aumentar el pluralismo y esas cosas, ahora se quieren quedar con nosotros haciéndonos creer que se van a fusionar para que cuatro gatos (bueno, dos) manejen el cotarro. Y para aumentar el pitorreo dicen que se juntan Antena 3 y laSexta por un lado, y Telecinco y Cuatro por otro. Fíjate qué gracia que así empatan sumando nueve. A otro perro con ese hueso, que no somos tontos y el día de los inocentes es mañana.
26/12/09
CARRERAS DE MONARCAS
Estuvo mejor, pero sigue cojeando. Es lo que tiene intentar modernizar un formato tan acartonado como el de la tradicional Retransmisión de la tradicional Lectura del tradicional Mensaje de la tradicional Navidad del tradicional Rey de la tradicional España. Este año mejoró con los cambios, pero aún queda mucho por hacer si queremos que el pueblo español se implique más y siga el acto con más atención.
A ver. Está bien que ahora se grabe en un formato panorámico de alta definición para crear un “efecto más cinematográfico”, que no se utilice de plató ese Salón de Audiencias lleno de tapices, sino una sala más informal con las cortinas abiertas para que se viera el jardín, pero estos cambios cosméticos no van al fondo del asunto. Subir la audiencia introduciendo una mujer de rojo abalanzándose sobre el monarca o el lanzamiento de souvenirs sería demasiado arriesgado, así que lo mejor es ofrecer al pueblo soberano un producto audiovisual actual, digital, interactivo y multimedia.
Desde aquí proponemos carreras de monarcas. Se trata de empezar la Nochebuena haciendo zapping como locos a ver en qué cadena el Rey va leyendo antes y en cuál después. Todos lo hicimos alguna vez, sólo falta añadir emoción introduciendo las apuestas en familia, que eso une mucho en Navidad. Este año las cadenas analógicas más rápidas fueron Antena 3 y laSexta. En TDT ganaba laSexta y su Rey decía “tan entrañables” un par de segundos antes que los demás. Ahora habría que liberalizar el mercado y evitar ese monopolio que supone la señal institucional única, que hurta emoción al acontecimiento. También habría que introducir pausas publicitarias obligatorias, que funcionarían como las entradas en boxes de Fórmula 1, ¡qué nervios! Las cadenas, además, podrían introducir innovaciones: cámaras subjetivas como las de los encierros de San Fermín añadirían emoción y nos ofrecerían un rey más cercano. ¿Se imaginan la polémica si ganara la ETB vasca?
A ver. Está bien que ahora se grabe en un formato panorámico de alta definición para crear un “efecto más cinematográfico”, que no se utilice de plató ese Salón de Audiencias lleno de tapices, sino una sala más informal con las cortinas abiertas para que se viera el jardín, pero estos cambios cosméticos no van al fondo del asunto. Subir la audiencia introduciendo una mujer de rojo abalanzándose sobre el monarca o el lanzamiento de souvenirs sería demasiado arriesgado, así que lo mejor es ofrecer al pueblo soberano un producto audiovisual actual, digital, interactivo y multimedia.
Desde aquí proponemos carreras de monarcas. Se trata de empezar la Nochebuena haciendo zapping como locos a ver en qué cadena el Rey va leyendo antes y en cuál después. Todos lo hicimos alguna vez, sólo falta añadir emoción introduciendo las apuestas en familia, que eso une mucho en Navidad. Este año las cadenas analógicas más rápidas fueron Antena 3 y laSexta. En TDT ganaba laSexta y su Rey decía “tan entrañables” un par de segundos antes que los demás. Ahora habría que liberalizar el mercado y evitar ese monopolio que supone la señal institucional única, que hurta emoción al acontecimiento. También habría que introducir pausas publicitarias obligatorias, que funcionarían como las entradas en boxes de Fórmula 1, ¡qué nervios! Las cadenas, además, podrían introducir innovaciones: cámaras subjetivas como las de los encierros de San Fermín añadirían emoción y nos ofrecerían un rey más cercano. ¿Se imaginan la polémica si ganara la ETB vasca?
24/12/09
SOY UN CANAL TEMÁTICO
Hola, soy un canal temático y, ¿para que os voy a engañar?, me importa una mierda seca que hoy sea Nochebuena. A mí plin. ¿24 de diciembre? Por mí como si es 24 de febrero o 12 de junio. Me da de lado. Me la pela. Me tiene sin cuidado. Incluso aseguraría que me importa un bledo si supiera qué es un bledo. Ya sé que a mis abuelas, las cadenas generalistas, esto les parecerá el mayor sacrilegio que un medio de comunicación puede cometer. "Ay, estos canales modernos", se queja TVE con amargura, "que no tienen ningún respeto por las tradiciones. Con lo que nos curramos nosotros estas fiestas, que si Nino Bravo, que si Josema y Flo, que si la Misa del Gallo. Y ellas no se dignan ni a emitir el discurso de su alteza el Rey".
Pues es cierto. Ni el discurso de su alteza el Rey ni el discurso de su bajeza Chiquito de la Calzada. El solsticio de invierno me afecta tanto como el equinoccio de primavera. Si sintonizan hoy la FOX a la hora en la que Antena 3 está emitiendo capítulos especiales de "Los Simpsons" relacionados con la Navidad podrán disfrutar de capítulos normales de "Los Simpsons" no relacionados con la Navidad. ¿Telecinco emite un especial navideño con Paz Padilla y Joaquín Prats Jr? Pues Canal Viajar emite un no especial navideño sobre los niños en el Japón, Odisea ofrece un documental sobre Tutankamón no presentado por Paz Padilla, y Canal Cocina programa el capítulo 8 de "Cocinando en Australia" con la no participación destacada de Joaquín Prats Jr. Rebusquen un poco por las cadenas de series y seguramente encontrarán los auténticos episodios de "Flashforward" en el mismo momento en el que toda la tropa de "El hormiguero" está sufriendo un flashforward que les hace contemplar su inquietante futuro.
Soy un canal temático, y por no tener no tengo ni cena de empresa navideña. Dicho de otra manera, que el que vea el especial de Raphael que emite la televisión pública es porque quiere. Que luego no venga llorando.
Pues es cierto. Ni el discurso de su alteza el Rey ni el discurso de su bajeza Chiquito de la Calzada. El solsticio de invierno me afecta tanto como el equinoccio de primavera. Si sintonizan hoy la FOX a la hora en la que Antena 3 está emitiendo capítulos especiales de "Los Simpsons" relacionados con la Navidad podrán disfrutar de capítulos normales de "Los Simpsons" no relacionados con la Navidad. ¿Telecinco emite un especial navideño con Paz Padilla y Joaquín Prats Jr? Pues Canal Viajar emite un no especial navideño sobre los niños en el Japón, Odisea ofrece un documental sobre Tutankamón no presentado por Paz Padilla, y Canal Cocina programa el capítulo 8 de "Cocinando en Australia" con la no participación destacada de Joaquín Prats Jr. Rebusquen un poco por las cadenas de series y seguramente encontrarán los auténticos episodios de "Flashforward" en el mismo momento en el que toda la tropa de "El hormiguero" está sufriendo un flashforward que les hace contemplar su inquietante futuro.
Soy un canal temático, y por no tener no tengo ni cena de empresa navideña. Dicho de otra manera, que el que vea el especial de Raphael que emite la televisión pública es porque quiere. Que luego no venga llorando.
23/12/09
HIJO MÍO, NO TE APOYO
Hay que actualizarse, no puede estar uno quejándose siempre de lo mismo diciendo las mismas cosas. Así que vamos a quejarnos de lo mismo diciendo cosas nuevas. Y le daremos un enfoque que puede animar cualquier sobremesa navideña. La idea es esta: los padres no deben apoyar a sus hijos. Ni siquiera deben apoyar a sus sobrinos. Y los hermanos tampoco deben apoyar a sus hermanos pequeños. Y, ya puestos a escandalizar a todo el mundo, los abuelos tampoco deben apoyar a sus nietos.
Si ustedes hubieran visto “Curso del 63” lo comprenderían. Cuando un participante marchó del programa porque no soportaba cortar el pelo (porque para él su pelo lo era todo, todo, todo), sus padres salieron después mirando seriamente a la cámara para decir que apoyaban a su hijo, que si su hijo decía eso (o cualquier otra cosa) no había más que hablar. Seguro que de niño no le recomendaban qué pedir a los Reyes Magos para no influir sobre él, por Dios, qué horror. Su hijo era libre para que los anuncios de la tele le dijeran qué le gustaba, qué debía pensar y qué pedir. Ellos se limitarían a apoyarle, porque los padres guays deben apoyar a sus hijos.
Vale, pues aquí siempre nos quejamos de que los niños escriban solos su carta a los Reyes Magos, pero este año con más razón. En “Curso del 63” nos enseñaron el resultado que da y produce escalofríos. Así que ya saben, si tienen hijos, sobrinos, nietos o hermanos pequeños, háganles un favor y ayúdenles a escribir la carta. Apáguenles un poco la tele y charlen con ellos sobre las cosas buenas que tienen esos juegos y juguetes que no piden a los Reyes porque no salen en la tele y no los conocen. Ábranles los ojos contándoles las trampas que esconden todos esos anuncios de juguetes tan monos que ni siquiera necesitan al niño porque, mientras dure la batería, juegan solos que es un primor. Pero, sobre todo, no les apoyen porque sí: eso es lo que conviene a los anunciantes, pero no a los niños.
Si ustedes hubieran visto “Curso del 63” lo comprenderían. Cuando un participante marchó del programa porque no soportaba cortar el pelo (porque para él su pelo lo era todo, todo, todo), sus padres salieron después mirando seriamente a la cámara para decir que apoyaban a su hijo, que si su hijo decía eso (o cualquier otra cosa) no había más que hablar. Seguro que de niño no le recomendaban qué pedir a los Reyes Magos para no influir sobre él, por Dios, qué horror. Su hijo era libre para que los anuncios de la tele le dijeran qué le gustaba, qué debía pensar y qué pedir. Ellos se limitarían a apoyarle, porque los padres guays deben apoyar a sus hijos.
Vale, pues aquí siempre nos quejamos de que los niños escriban solos su carta a los Reyes Magos, pero este año con más razón. En “Curso del 63” nos enseñaron el resultado que da y produce escalofríos. Así que ya saben, si tienen hijos, sobrinos, nietos o hermanos pequeños, háganles un favor y ayúdenles a escribir la carta. Apáguenles un poco la tele y charlen con ellos sobre las cosas buenas que tienen esos juegos y juguetes que no piden a los Reyes porque no salen en la tele y no los conocen. Ábranles los ojos contándoles las trampas que esconden todos esos anuncios de juguetes tan monos que ni siquiera necesitan al niño porque, mientras dure la batería, juegan solos que es un primor. Pero, sobre todo, no les apoyen porque sí: eso es lo que conviene a los anunciantes, pero no a los niños.
22/12/09
SINCRONIZACIÓN
Sincronizado del todo no está, pero se deja ver
El último estreno de Cuatro está bien, pero tiene problemas de sincronización. Se llama “Vaya tropa”, se emite los domingos por la noche y utiliza el humor para poner “la actualidad patas arriba”. Ése es el problema: atrapar en un programa semanal una actualidad que cambia cada día y corre como una centella es imposible. Programas de humor como “El informal”, “La hora Hache”, “Buenafuente” o “El intermedio” nos han enseñado a reírnos por la noche de lo que ocurre por la mañana. Por eso, cuando vemos en un sketch al rey explicando a uno de sus nietos el caso Gürtel (una revisión de “El traje nuevo del emperador” en la que es la factura lo que resulta invisible), nos hace gracia, sí, pero nos parece que se refiere a algo que ocurrió en el paleozoico.
También estará bien Jota, ese personaje animado que comparte labores de presentación con Arturo Valls, pero también tiene problemas de sincronización. Jota será una virguería tecnológica en 3-D que se mueve aprovechando un programa puntero de captura de movimiento en tiempo real, pero no encaja el playback. No coincide cuando habla con el movimiento de la boca. Es muy superior a antiguallas como las hormigas Trancas y Barrancas, pero al menos a éstas se las reconoce, mientras que sabemos que Jota es una cabra porque lo dijeron doce veces.
Cuando supera los problemas de sincronización, “Vaya tropa” funciona bien. Como muestra está el hallazgo que supone la actualización de la música tradicional que hacen en el sketch de la Reggaetuna y los Hip-joteros. Pero la desincronización es mejor. Hace una semana el “Telediario 2” fue suspendido porque no coincidía la imagen con el sonido. Los tres millones de personas que lo vieron se partirán de risa cuando en “Vaya tropa” pongan patas arriba esa noticia de la actualidad de hace siete días dentro de un par de semanas.
21/12/09
THIS IS IT
Enigma resuelto. Elvis está vivo. Está en un cuarto forrado de leopardo dorado con una bata de seda mirando diez canales a la vez. En uno de ellos, ve cómo Michael Jackson acude en limusina al plató de “Sálvame Deluxe” a mostrar el resultado de la última cirugía antiestética. Ahora dice llamarse “Belén Esteban”, pero ya no engaña a nadie. El realizador del programa emitió sin querer unas imágenes de los pasillos de Telecinco en los que se veía cómo la Esteban avanzaba caminando hacia atrás, con ese estilo inconfundible del moonwalk que sólo imprime el auténtico Jacko.
Los rumores habían comenzado hace unos meses, cuando se decía que la revista “¡Hola!” había pagado un dineral por unas fotos en las que se veía a Belén Esteban descolgando peligrosamente a su hija Andreíta por la ventana para mostrarla a sus seguidores. La revista había decidido no publicar las imágenes por el mismo motivo por el que no publica las fotos comprometedoras que posee de diferentes miembros de la Familia Real, pero esta vez el tiro le salió por la culata. Como fue “Lecturas” quien primero publicó las imágenes de la última cirugía de la reina del pop, se dice que “Hola” sacará a la luz esas fotos en desagravio. En Telecinco lo saben todos, pero es gente muy indiscreta y no callan nada: sólo lo permitirán si luego recorre todos sus programas contándolo todo con cicatrices, pelos y señales.
La única escapatoria que le queda ahora a Belén Jackson es la huida hacia delante. Reducirse el mentón. Implantarse más pelo. Quitarse alguna costilla. Cambiar de nariz. Incrustarse córneas de colores. Hacerse un estiramiento de circunvoluciones cerebrales. Realizar un tratamiento de botox por inmersión para solidificar esas rebeldes esquinas de la frente que aún consiguen arrugarse y parecer humanas. Dejar de ser Peter Pan para convertirse en Robopop. Vivir en un quirófano y salir sólo para vender la exclusiva que le permita pagar la siguiente intervención. Será mejor así.
20/12/09
OBJETIVO: SOBREVIVIR
Es la misión fundamental de los programas de televisión. Sobrevivir como sea. A toda costa. Haciendo lo que haya que hacer. Hay centenares de títulos peleando a muerte para conseguir una cuota de pantalla que les permita alcanzar una emisión más. Con el paso de los años y la competencia sin piedad, se han ido desarrollando estrategias sorprendentes, increíblemente sofisticadas, para adaptarse con éxito a los requisitos de un ambiente terriblemente hostil: algunos programas se ríen de forma cruel de otros; otros emiten sus editoriales informativos desde camas de hospital; los hay que, en el colmo de la complicación, operan las caras de sus presentadoras para arañar un poco más de alimento durante algunas semanas. Todo por el éxito evolutivo. Pero hoy quisiera centrarme en la más fascinante especialización supervivencial que se puede ver estos días en televisión: la que han realizado los documentales de naturaleza, más concretamente, la subespecie de documentales de naturaleza producidos por la BBC.
La estrategia adaptativa de este género consiste en realizar cada vez productos más extraordinarios, de imágenes increíbles y realizaciones que hacen que el espectador continúe con la boca abierta muchas horas después de haber terminado el programa. El último ejemplo de este adelanto evolutivo lo podemos ver estos días en Canal+, se llama "Life. Objetivo: Sobrevivir" y está dedicado a las estrategias sorprendentes e increíblemente sofisticadas que con el paso de los eras y la competencia sin piedad han ido desarrollando las especies animales de todo tipo para adaptarse con éxito a los requisitos de un ambiente terriblemente hostil. Hagan ustedes lo que tengan que hacer, pero, créanme, no se lierdan esta serie bajo ningún concepto: verán las imágenes más fabulosas del mundo animal que jamás vieron los seres humanos y, sobre todo, descubrirán cómo está consiguiendo sobrevivir con éxito un género televisivo mostrando cómo está consiguiendo sobrevivir con éxito el pulpo gigante, el camaleón o la venus atrapamoscas.
La estrategia adaptativa de este género consiste en realizar cada vez productos más extraordinarios, de imágenes increíbles y realizaciones que hacen que el espectador continúe con la boca abierta muchas horas después de haber terminado el programa. El último ejemplo de este adelanto evolutivo lo podemos ver estos días en Canal+, se llama "Life. Objetivo: Sobrevivir" y está dedicado a las estrategias sorprendentes e increíblemente sofisticadas que con el paso de los eras y la competencia sin piedad han ido desarrollando las especies animales de todo tipo para adaptarse con éxito a los requisitos de un ambiente terriblemente hostil. Hagan ustedes lo que tengan que hacer, pero, créanme, no se lierdan esta serie bajo ningún concepto: verán las imágenes más fabulosas del mundo animal que jamás vieron los seres humanos y, sobre todo, descubrirán cómo está consiguiendo sobrevivir con éxito un género televisivo mostrando cómo está consiguiendo sobrevivir con éxito el pulpo gigante, el camaleón o la venus atrapamoscas.
19/12/09
QUÉ MAJOS
¿Sabía usted que la ex modelo sueca Elin Nordegren pide a su marido Tiger Woods un pastón por sus continuas infidelidades? ¿Sí?, pues muy mal, porque no debería saberlo. Bueno, a no ser que se haya enterado por la radio o los periódicos, que entonces es cosa suya saberlo o no. En realidad también vale que se haya enterado por la tele, siempre y cuando no se trate de que el jueves lo vio en el programa “Gente”. En ese caso habría cometido un error: haber visto en La 1 un programa que no es de servicio público, algo que no volverá a ocurrir en 2010 porque TVE va a eliminarlo.
Volvamos a probar. ¿Sabía que Adriana Abascal, enamorada de nuevo, aclaró las noticias de su separación en una sincera entrevista? ¿Y que María Pineda, muy recuperada de su enfermedad, asistió al último estreno de su ex novio Joaquín Cortés? ¿No? Pues muy mal, porque debería saberlo. Al menos eso piensa TVE, que dio estas noticias de alcance en “Corazón” (el programa de Anne Igartiburu anteriormente conocido como “Corazón de la estación del año que toque”). Naturalmente, un espacio con noticias de este calibre no puede faltar en una cadena pública, así que seguirá emitiéndose cuando “Gente” haya desaparecido.
Imagínese, qué sé yo, que entes semovientes como Carmen Martínez Bordiú y su actual advenedizo, José Campos, salen a la calle y ella no puede hacer declaraciones porque firmó una exclusiva con una revista. Pues claro, en ese caso el Estado español debe cumplir su función de servicio público enviando unos reporteros al lugar para que los podamos ver amarraditos los dos, y oigamos cómo él, que sí puede hablar y por desgracia lo hace, dice lo que piensa respecto a su vida, a sí mismo y a su propio mecanismo. Los ciudadanos pagaremos encantados nuestros impuestos viendo que sirven para costear reportajes de investigación como éste, emitido el jueves en “Corazón” con un título inolvidable: “¡Qué majos!”.
Volvamos a probar. ¿Sabía que Adriana Abascal, enamorada de nuevo, aclaró las noticias de su separación en una sincera entrevista? ¿Y que María Pineda, muy recuperada de su enfermedad, asistió al último estreno de su ex novio Joaquín Cortés? ¿No? Pues muy mal, porque debería saberlo. Al menos eso piensa TVE, que dio estas noticias de alcance en “Corazón” (el programa de Anne Igartiburu anteriormente conocido como “Corazón de la estación del año que toque”). Naturalmente, un espacio con noticias de este calibre no puede faltar en una cadena pública, así que seguirá emitiéndose cuando “Gente” haya desaparecido.
Imagínese, qué sé yo, que entes semovientes como Carmen Martínez Bordiú y su actual advenedizo, José Campos, salen a la calle y ella no puede hacer declaraciones porque firmó una exclusiva con una revista. Pues claro, en ese caso el Estado español debe cumplir su función de servicio público enviando unos reporteros al lugar para que los podamos ver amarraditos los dos, y oigamos cómo él, que sí puede hablar y por desgracia lo hace, dice lo que piensa respecto a su vida, a sí mismo y a su propio mecanismo. Los ciudadanos pagaremos encantados nuestros impuestos viendo que sirven para costear reportajes de investigación como éste, emitido el jueves en “Corazón” con un título inolvidable: “¡Qué majos!”.
18/12/09
THE ULTIMATE ANA ROSA EXPERIENCE
Ana Rosa, por favor, tienes que dejarme que te chupe un poquito. Cualquier parte, de verdad. Como si es un codo. No te extrañes, te aseguro que no tengo el menor interés sexual. Y también tengo que tocarte. De nuevo da igual la parte que me ofrezcas para que la tantee. Me conformo con estrecharte la mano o rozarte una rodilla o agarrarte suavemente del antebrazo durante escasísimos segundos. Pero tengo que tocarte. Chuparte y tocarte. Tocarte y chuparte. Tienes que ser tú. No me vale Susanna Griso ni Mariló Montero. Y no es por ninguna parafilia extravagante. Es que ya es lo único que me falta para tener una percepción completa, holística, multimedia, de ti. Ana Rosa total. Ana Rosa en todos los sentidos. The ultimate Ana Rosa experience.
Ya sabes por dónde voy, ¿verdad? Claro. Esta columna trata sobre el perfume que acabas de sacar al mercado. "Estilo Ana Rosa". Hasta ahora los españoles podíamos mirarte y escucharte. Verte y oírte, más bien. Nuestros sentidos de la vista y el oído ya se habían solazado en el perímetro de tu persona. Pero ahora además vamos a poder olerte. Olerte, Ana Rosa, la eterna carencia de los medios audiovisuales al fin resuelta gracias a Perfumes Puig. ¿A qué huelen las cosas que no huelen? ¿A qué huele Ana Rosa Quintana? Basta ya de acercar la nariz a la pantalla durante las mañanas telecínquicas y olfatear frenéticamente en busca de una brizna de aroma. Con "Estilo Ana Rosa" también nuestra nariz experimentará la plenitud de la reina de las mañanas con una irrepetible mezcla de notas verdes de bergamota, sobaquina de Lecquio, bótox, flores de naranja y falta completa de escrúpulos.
Es por lo que te pido que satisfagas también mi tacto y mi gusto, -mi gusto palatino, del paladar, vamos, que la satisfacción de los otros gustos la tienes un poco más complicada-. Tocarte y chuparte un poquito para que te conozcan mis cinco sentidos. Mmm... Ana Rosa ofrecida materialmente a su público para que la televisión sea una experiencia sensorial completa.
Ya sabes por dónde voy, ¿verdad? Claro. Esta columna trata sobre el perfume que acabas de sacar al mercado. "Estilo Ana Rosa". Hasta ahora los españoles podíamos mirarte y escucharte. Verte y oírte, más bien. Nuestros sentidos de la vista y el oído ya se habían solazado en el perímetro de tu persona. Pero ahora además vamos a poder olerte. Olerte, Ana Rosa, la eterna carencia de los medios audiovisuales al fin resuelta gracias a Perfumes Puig. ¿A qué huelen las cosas que no huelen? ¿A qué huele Ana Rosa Quintana? Basta ya de acercar la nariz a la pantalla durante las mañanas telecínquicas y olfatear frenéticamente en busca de una brizna de aroma. Con "Estilo Ana Rosa" también nuestra nariz experimentará la plenitud de la reina de las mañanas con una irrepetible mezcla de notas verdes de bergamota, sobaquina de Lecquio, bótox, flores de naranja y falta completa de escrúpulos.
Es por lo que te pido que satisfagas también mi tacto y mi gusto, -mi gusto palatino, del paladar, vamos, que la satisfacción de los otros gustos la tienes un poco más complicada-. Tocarte y chuparte un poquito para que te conozcan mis cinco sentidos. Mmm... Ana Rosa ofrecida materialmente a su público para que la televisión sea una experiencia sensorial completa.
17/12/09
VOTO A BRÍOS
Antes de nada, ¿qué le parece la participación ciudadana en consultas que cualquiera se saca de la manga? Si le parece bien envíe un SMS con el mensaje “625ranasbien” y si le parece mal uno con el mensaje “625ranasmal”. Es que en el artículo de hoy voy a ocuparme de la turra que nos dieron estos días atrás en la tele con la consulta independentista catalana y quiero tener en cuenta su opinión. Claro que si le parece que el asunto ya pasó y es mejor olvidarlo puede enviar un SMS con el mensaje “625ranasolvidalo”. En caso contrario debe decir “625ranastiraquelibras”.
Vote lo que vote ha de reconocer que estos días vimos informativos que parecían monumentos a la petición de principio, círculos viciosos hechos noticia. Primero salían unos cuantos militares manifestándose para pedir el derecho a manifestarse, y luego, sin que nos diera tiempo a resolver el acertijo, salían unos cuantos ciudadanos del nordeste de la península votando sobre lo que les da la gana para pedir el derecho a votar sobre lo que les da la gana. Si también usted quiere participar en estos juegos lógicos, envíe un SMS con el palíndromo “someto votemos”; si no, envíe “malditalagracia”, que no es un palíndromo ni de lejos.
El caso es que una tropa de contertulios y comunicólogos analizaron en diferentes cadenas esta consulta catalana y señalaron que no tenía ninguna validez, ni era representativa, ni mayoritaria, ni oficial. Después animaban a los espectadores a ofrecer su opinión al respecto enviando mensajes de móvil al número que aparecía sobreimpreso. ¿Cree que estas consultas telefónicas que las cadenas se inventan para recaudar dinero, donde lo importante del voto (que en pantalla sale bien grande) es el precio de la llamada (que apenas se ve), sí tienen validez, son representativas, mayoritarias y oficiales? Si cree que sí envíe un SMS con el mensaje “claroporesovototodoloquesemenea”. Si cree que no, voto a bríos, no vote.
Vote lo que vote ha de reconocer que estos días vimos informativos que parecían monumentos a la petición de principio, círculos viciosos hechos noticia. Primero salían unos cuantos militares manifestándose para pedir el derecho a manifestarse, y luego, sin que nos diera tiempo a resolver el acertijo, salían unos cuantos ciudadanos del nordeste de la península votando sobre lo que les da la gana para pedir el derecho a votar sobre lo que les da la gana. Si también usted quiere participar en estos juegos lógicos, envíe un SMS con el palíndromo “someto votemos”; si no, envíe “malditalagracia”, que no es un palíndromo ni de lejos.
El caso es que una tropa de contertulios y comunicólogos analizaron en diferentes cadenas esta consulta catalana y señalaron que no tenía ninguna validez, ni era representativa, ni mayoritaria, ni oficial. Después animaban a los espectadores a ofrecer su opinión al respecto enviando mensajes de móvil al número que aparecía sobreimpreso. ¿Cree que estas consultas telefónicas que las cadenas se inventan para recaudar dinero, donde lo importante del voto (que en pantalla sale bien grande) es el precio de la llamada (que apenas se ve), sí tienen validez, son representativas, mayoritarias y oficiales? Si cree que sí envíe un SMS con el mensaje “claroporesovototodoloquesemenea”. Si cree que no, voto a bríos, no vote.
16/12/09
POST WYOMING ERGO PROPTER WYOMING
Canta el gallo y a continuación sale el sol. Todos los días. Nadie se atrevería a ponerlo en duda: es el gallo la causa de que salga el sol. Compruébenlo cuando quieran. María Albelo y Luis Gómez llevaban más de tres años intentando tener un hijo. Un día María se animó a seguir el consejo de una amiga e incluyó en su dieta unos suplementos de vitamina B. Un mes después ya estaba embarazada. Por tanto, queda probado que la vitamina B favorece los embarazos. ¿O no? Los días de la semana en los que la gente se levanta más tarde son aquéllos en donde se registran más accidentes de coche por la noche. La relación es casi perfecta. Así pues, podemos concluir que dormir la mañana provoca fallos en la conducción muchas horas después.
Estamos ante una falacia conocida como "post hoc ergo propter hoc", una forma errónea de razonar según la cual se concluye que el suceso A causó el suceso B por el mero hecho de que el suceso A ha ocurrido antes que el suceso B. "Después de eso, luego a causa de eso" podría ser una traducción del latinajo, aunque una adaptación algo más libre y algo más actualizada a la España actual tomaría la forma de "Después de Wyoming, luego a causa de Wyoming". Todo aquello que ocurra después de que Wyoming haya hecho algo que tenga que ver con ello ocurre debido a lo que hizo Wyoming que tuvo que ver con ello. Hermann Tertsch fue agredido por algún salvaje días después de que Wyoming hiciera en el programa de humor "El intermedio" un montaje creando frases surrealistas sobre asesinatos y rehenes a partir de una real suya que hablaba de asesinatos y rehenes. No importa que el propio periodista haya desvinculado ambos hechos o asegurado que él ha sido hostigado por energúmenos indignados con sus editoriales antes y después de "El intermedio"; los lógicos más preclaros del erial ya han concluido la relación causal entre A y B a partir de la mera secuencia temporal A-B. Así se razona. Cuando conviene, claro. Cualquier día silencian a todos los gallos como forma de evitar que salga el sol.
Estamos ante una falacia conocida como "post hoc ergo propter hoc", una forma errónea de razonar según la cual se concluye que el suceso A causó el suceso B por el mero hecho de que el suceso A ha ocurrido antes que el suceso B. "Después de eso, luego a causa de eso" podría ser una traducción del latinajo, aunque una adaptación algo más libre y algo más actualizada a la España actual tomaría la forma de "Después de Wyoming, luego a causa de Wyoming". Todo aquello que ocurra después de que Wyoming haya hecho algo que tenga que ver con ello ocurre debido a lo que hizo Wyoming que tuvo que ver con ello. Hermann Tertsch fue agredido por algún salvaje días después de que Wyoming hiciera en el programa de humor "El intermedio" un montaje creando frases surrealistas sobre asesinatos y rehenes a partir de una real suya que hablaba de asesinatos y rehenes. No importa que el propio periodista haya desvinculado ambos hechos o asegurado que él ha sido hostigado por energúmenos indignados con sus editoriales antes y después de "El intermedio"; los lógicos más preclaros del erial ya han concluido la relación causal entre A y B a partir de la mera secuencia temporal A-B. Así se razona. Cuando conviene, claro. Cualquier día silencian a todos los gallos como forma de evitar que salga el sol.
15/12/09
GLÁNDULA
La cámara se acerca y llega a entrar por la ventana de la salita. Jorge y Claudia están medio tumbados en el sofá. Sobre la mesa hay una bandeja con restos de una cena. Discuten sobre qué ver en la tele. En La 2 se está emitiendo "Crónicas: 1979, los últimos retos de la Transición", hecho a base de imágenes de archivo y entrevistas actuales a los protagonistas de la política española en aquellos años. Antena 3 emite "Estás invitado", un nuevo reality en donde miembros de familias que llevan muchos años sin contacto comparten convivencia en una casa hasta que poco a poco van descubriendo quiénes son las personas que llevan buscando tanto tiempo. "Por Dios, qué rollo, ni se te ocurrirá poner esto, ¿verdad?". "Estás mal de la cabeza si te crees que voy a aguantar a estas tías aquí lloriqueando porque quieren conocer a su padre". "Haz el favor, eh, quita ahora mismo este coñazo, ¿a mí qué me importan los atentados que hacía ETA en 1979?".
Aceptan a regañadientes ver un rato cada programa. Cuando Claudia se hace con el mando a distancia y atiende interesada a la pantalla Jorge la mira con absoluta extrañeza, como si no reconociera a la mujer con la que ha vivido todos estos años. Es imposible que a nadie le guste lo que le gusta a Claudia. De hecho, él se siente tan aburrido a los pocos segundos que coge cualquier revista o libro de la mesa para matar el tiempo hasta que pueda cambiar de cadena. Entonces es Claudia la que resopla, lo mira con una enorme distancia y duda de si Jorge en verdad quiere ver esa cadena o lo hace solamente para fastidiarla. Es imposible que a nadie le guste lo que le gusta a Jorge. La noche avanza. En el televisor se ve a Tarradellas en el Palacio de la Generalitat, a Esther llorando al ser reconocida por la esposa de su padre, a Martín Villa hablando de los rumores de golpe de Estado durante la Transición, a Miguel confesándole a Manuel por qué abandonó a su familia. Jorge y Claudia se han quedado dormidos. La cámara se aleja hasta abarcar toda la fachada del edificio con bastantes ventanas iluminadas. La distancia convierte cualquier emisión de los televisores en una luz trémula indistinguible que rebota contra las paredes. Afuera el frío es absoluto. Comienzan a caer copos de nieve apáticos, afilados, como salidos de alguna glándula.
Aceptan a regañadientes ver un rato cada programa. Cuando Claudia se hace con el mando a distancia y atiende interesada a la pantalla Jorge la mira con absoluta extrañeza, como si no reconociera a la mujer con la que ha vivido todos estos años. Es imposible que a nadie le guste lo que le gusta a Claudia. De hecho, él se siente tan aburrido a los pocos segundos que coge cualquier revista o libro de la mesa para matar el tiempo hasta que pueda cambiar de cadena. Entonces es Claudia la que resopla, lo mira con una enorme distancia y duda de si Jorge en verdad quiere ver esa cadena o lo hace solamente para fastidiarla. Es imposible que a nadie le guste lo que le gusta a Jorge. La noche avanza. En el televisor se ve a Tarradellas en el Palacio de la Generalitat, a Esther llorando al ser reconocida por la esposa de su padre, a Martín Villa hablando de los rumores de golpe de Estado durante la Transición, a Miguel confesándole a Manuel por qué abandonó a su familia. Jorge y Claudia se han quedado dormidos. La cámara se aleja hasta abarcar toda la fachada del edificio con bastantes ventanas iluminadas. La distancia convierte cualquier emisión de los televisores en una luz trémula indistinguible que rebota contra las paredes. Afuera el frío es absoluto. Comienzan a caer copos de nieve apáticos, afilados, como salidos de alguna glándula.
14/12/09
MENOS CINE, POR FAVOR
Cine, cine, cine, cine. Menos cine, por favor. Sábado después de comer. La 1: Sesión de tarde. Antena 3: Multicine. Cuatro: Home Cinema. Telecinco: Cine On. LaSexta: Cine. Si no te gusta una película sobre una familia deshecha por un terrible secreto que oculta su pasado siempre puedes ver aquella sí-hombre-aquella de Sandra Bullock de hace diez años. Espera, ¿ésta no es en la que al final se descubre que la chica era una princesa de no sé dónde? Pon la otra, anda, en la que unos recién casados tienen que cuidar de los nueve hijos de los vecinos durante una semana. La ponen todos los meses pero te ríes. ¿Y el domingo a la misma hora? La 1: Sesión de tarde. Antena 3: Multicine. Cuatro: Home Cinema. Telecinco: Cine On. Primer mandamiento de la Santa Madre Televisión: "En las sobremesas de los días entre semana podrás programar telenovelas, programas del corazón, concursos, documentales, pero jamás de los jamases programarás cine". Segundo mandamiento de la Santa Madre Televisión: "En las sobremesas de los fines de semana sólo podrás programar cine, y jamás de los jamases programarás telenovelas, programas del corazón, concursos o documentales".
Por eso el mero hecho de que laSexta programe los domingos a las 4 de la tarde dos capítulos de "El mentalista" va más allá de la anécdota trivial que acuna con la cara del bueno de Patrick Jane las siestas chupiteras. Se trata de uno de los actos de rebeldía hereje más arriesgados que podemos contemplar en la televisión actual. No sólo el mentalista se pasa cada episodio quebrantando las normas más elementales de la policía y recibiendo las miradas furiosas de Teresa Lisbon, también laSexta viola los códigos de honor implícitos más arraigados de la televisión emitiendo sus magníficas aventuras a la hora en la debería estar ofreciendo "Sólo en casa 45", "Más allá del atardecer" o "Dos cantantes muy tunantes". Cine, cine, cine, cine y "El mentalista". Cine, cine, cine, cine y "Padre de familia". Menos cine, por favor.
Por eso el mero hecho de que laSexta programe los domingos a las 4 de la tarde dos capítulos de "El mentalista" va más allá de la anécdota trivial que acuna con la cara del bueno de Patrick Jane las siestas chupiteras. Se trata de uno de los actos de rebeldía hereje más arriesgados que podemos contemplar en la televisión actual. No sólo el mentalista se pasa cada episodio quebrantando las normas más elementales de la policía y recibiendo las miradas furiosas de Teresa Lisbon, también laSexta viola los códigos de honor implícitos más arraigados de la televisión emitiendo sus magníficas aventuras a la hora en la debería estar ofreciendo "Sólo en casa 45", "Más allá del atardecer" o "Dos cantantes muy tunantes". Cine, cine, cine, cine y "El mentalista". Cine, cine, cine, cine y "Padre de familia". Menos cine, por favor.
13/12/09
A FREÍR CHURROS
El mundo se acaba, jopelines. El final podría deberse a que a los neutrinos les da un pronto porque sí y calientan la Tierra sin calentar a las personas, pero no caerá esa breva. Esto va a ser mucho más aburrido que “2012”. Se tratará simplemente de que los extraterrestres se van a adueñar del planeta y nos van a mandar a freír churros. Sin efectos especiales ni miramientos. A freír churros y ya está.
Las primeras señales de advertencia ya han ocurrido: el Ministerio de Defensa británico ya no investigará más los avistamientos ovnis denunciados por los ciudadanos. Si esta noticia nos pillara en otro momento nos alegraríamos porque dejara de tirarse el dinero en perseguir gilichorradas, pero no ahora, justo cuando el mundo de las tonterías paranormales logra por fin producir un bien a la sociedad. El logro se debe a la parodia que Buenafuente y Berto hacen de Íker Jiménez y Carmen Porter. ¿Debe desaparecer la sección “Cuarto y Mitad” de “Buenafuente” porque desaparezca “Cuarto Milenio” debido a que a Cuatro le da un ataque de vergüenza torera viendo que lo de investigar gilichorradas ya no cuela? ¡De eso nada! Si los británicos se retiran no es porque desde los inicios del fenómeno ovni (hace 60 años) hayan investigado 11.000 casos sin encontrar nada de nada, es porque los extraterrestres se han adueñado de sus mentes en un plan para adueñarse del mundo antes de destruirlo.
Hasta ahora la oficina ufológica del Ministerio de Defensa había frenado el avance ovni porque, claro, con 50.000 euracos de presupuesto anual detenía las hordas de ovnis poderosísimos que con tecnología ultrasofisticadas nos intentaban invadir sin éxito. Pero ahora que se han librado de esta oficina, se adueñarán del Reino Unido y de la humanidad entera antes de mandarnos a freír churros no en el año 2012, sino el 2011 (pero ya a finales). Háganme caso: despídanse de la vida con una sonrisa de “Cuarto y Mitad”, y manden a Fríker a freír churros para que vaya practicando.
12/12/09
TELEVISIÓN CONTEMPORÁNEA
Perdón, ¿hay algún médico en la sala? Sí, claro; la tele nos enseña que cuando se dice esta frase siempre hay un médico por la misma mágica razón que hace aparecer al Séptimo de Caballería justo en lo mejor de las pelis del Oeste. Pero es que esta vez es más difícil, porque no vale cualquier médico. Hace falta uno capaz de diagnosticar los casos en los que está “contraindicado psicológicamente” que un paciente vea por la tele sucesos truculentos, programas aburridísimos o, simplemente, telebasura. Y se equivoca quien diga que eso no puede diagnosticarse porque yo mismo estoy muy malito y empeoro justo cuando veo programas de televisión así.
Así que hace falta un médico como el que dictaminó que un señor tiene contraindicada psicológicamente la “música contemporánea” por prescripción facultativa. Esto permitió al paciente montar un pollo poniendo una denuncia el otro día en un concierto del V Festival de Jazz de Sigüenza alegando que aquello no era jazz sino música contemporánea. En cuanto un médico así me examine y ponga en un papelín con un sello oficial lo que me pasa con la “televisión contemporánea”, me voy a liar la manta a la cabeza y denunciar los programas que dicen ser informativos generales pero sólo informan de sucesos tremebundos (tiembla, Hilario Pino), los programas que dicen ser de entretenimiento y luego aburren a las piedras (tiembla, Mercedes Milá), y, en general, los programas que dicen ser de televisión guay y sólo son telebasura (tiembla, Jorge Javier Vázquez).
El espectador que denunció el concierto del Festival de Jazz de Sigüenza contó con la asistencia de un número de la Guardia Civil que se personó en el lugar y dio la razón al denunciante señalando que aquello no era jazz. No me digáis que no mola. Así que, venga, sé que esto ya es más difícil de conseguir pero por probar no se pierde nada: ¿Hay algún número de la Guardia Civil en la sala?
Así que hace falta un médico como el que dictaminó que un señor tiene contraindicada psicológicamente la “música contemporánea” por prescripción facultativa. Esto permitió al paciente montar un pollo poniendo una denuncia el otro día en un concierto del V Festival de Jazz de Sigüenza alegando que aquello no era jazz sino música contemporánea. En cuanto un médico así me examine y ponga en un papelín con un sello oficial lo que me pasa con la “televisión contemporánea”, me voy a liar la manta a la cabeza y denunciar los programas que dicen ser informativos generales pero sólo informan de sucesos tremebundos (tiembla, Hilario Pino), los programas que dicen ser de entretenimiento y luego aburren a las piedras (tiembla, Mercedes Milá), y, en general, los programas que dicen ser de televisión guay y sólo son telebasura (tiembla, Jorge Javier Vázquez).
El espectador que denunció el concierto del Festival de Jazz de Sigüenza contó con la asistencia de un número de la Guardia Civil que se personó en el lugar y dio la razón al denunciante señalando que aquello no era jazz. No me digáis que no mola. Así que, venga, sé que esto ya es más difícil de conseguir pero por probar no se pierde nada: ¿Hay algún número de la Guardia Civil en la sala?
11/12/09
MIL NUEVAS HORAS
No he visto ningún capítulo de "Amar en tiempos revueltos". Ninguno. Ni el capítulo 1, ni el capítulo 2, ni el capítulo 3... ni el capítulo 998, ni el capítulo 999, ni el capítulo 1000. Y eso que pensé en comenzar a ver la telenovela desde el mismo día de su estreno, pero un flashforward me tiró al suelo y me hizo verme a mí mismo cinco años después asistiendo a las celebraciones del millar de episodios, -perdón, del primer millar de episodios-. Cambié de opinión y comencé a valorar otras posiblidades: ¿y si empleaba esas mil horitas en convertirme en campeón del mundo de boxeo tailandés, en componer música dodecafónica para zambomba, en intentar analizar sintácticamente los versos de las profecías de Nostradamus? Al final me decidí por algo más clásico y me doctoré en Química Orgánica. ¿Hubiera hecho mejor zampándome los mil episodios de "Amar en tiempos revueltos"? Jamás lo sabré.
Pero me alegro de haber tenido la información que me proporcionó mi flashforward. Esta semana nos hemos enterado del fin de "As the world turns", una teleserie norteamericana que se ha mantenido 54 años en antena. "Guiding light", que falleció la primavera pasada, había alcanzado los 15.700 episodios a lo largo de 72 años de emisiones. Debería ser obligatorio advertir al comienzo de una teleserie del número de capítulos que ésta puede llegar a alcanzar si cuenta con la simpatía de la audiencia. "Las autoridades televisivas informan de que ver ‘Amar en tiempos revueltos’ puede ocuparle miles de horas a lo largo de los próximos años". Y luego ya uno decide si dedica ese tiempo a las artes marciales, a la música contemporánea, a la parapsicología o, por qué no, a enredarse en la vida cotidiana española durante el comienzo de la dictadura franquista, que no hay motivo para que ésta sea peor opción que ninguna de las nombradas con anterioridad. "Amar en tiempos revueltos" inicia su segundo millar de capítulos. Tengo que pensar a qué quiero dedicar mil nuevas horas durante los próximos cinco años.
Pero me alegro de haber tenido la información que me proporcionó mi flashforward. Esta semana nos hemos enterado del fin de "As the world turns", una teleserie norteamericana que se ha mantenido 54 años en antena. "Guiding light", que falleció la primavera pasada, había alcanzado los 15.700 episodios a lo largo de 72 años de emisiones. Debería ser obligatorio advertir al comienzo de una teleserie del número de capítulos que ésta puede llegar a alcanzar si cuenta con la simpatía de la audiencia. "Las autoridades televisivas informan de que ver ‘Amar en tiempos revueltos’ puede ocuparle miles de horas a lo largo de los próximos años". Y luego ya uno decide si dedica ese tiempo a las artes marciales, a la música contemporánea, a la parapsicología o, por qué no, a enredarse en la vida cotidiana española durante el comienzo de la dictadura franquista, que no hay motivo para que ésta sea peor opción que ninguna de las nombradas con anterioridad. "Amar en tiempos revueltos" inicia su segundo millar de capítulos. Tengo que pensar a qué quiero dedicar mil nuevas horas durante los próximos cinco años.
10/12/09
SAN TEOFREDO
Han empezado a aparecer en mi televisor anuncios llenos de copos de nieve, imágenes de fiestas y familias que se reúnen henchidas de felicidad. Qué curioso, pienso. Miro el calendario: 4 de diciembre. San Juan Damasceno. ¿Desde cuándo se celebra la festividad de San Juan Damasceno con copos de nieve? A lo mejor han puesto los anuncios hoy pero la fiesta es mañana: 6 de diciembre. San Sabas. ¿San Sabas? ¿"Sabas" es un nombre? ¿Hay un santo llamado así?. ¿Hay alguna celebración que relacione a San Sabas con la nieve en copos? ¿Y si es por el próximo fin de semana y han comenzado los anuncios con una semana de antelación? A veces los programadores televisivos son muy previsores. Sábado: Nuestra Señora de Guadalupe. Domingo: Santa Lucía.
Llamo al Servicio de Atención al Cliente de La Antenacinco. Me atiende un encargado. A partir de ahora las frases impares las dije yo y las pares me las contestó el encargado. Disculpe, ¿estos anuncios...?. ¿A qué se refiere?. ¿Que por qué ponen estos anuncios?. Coño, los anuncios de Navidad. No, no, yo digo los que han puesto hoy, no los que pondrán dentro de veinte días. No le entiendo. Vuelvo al modo narrativo habitual.
Entre el 5 y el 25 de diciembre trancurren veinte días, veinte santos que han quedado sepultados por la Natividad de Nuestro Señor Jesucristo. ¿A que molesta, Santa Leocadia (9 de diciembre)? ¿Pensabas que iba a ser así cuando escribiste "Cántico espiritual", San Juan de la Cruz (14 de diciembre)? ¿Por qué no te moriste en agosto, San Pedro Canisio, en vez de hacerlo un 21 de diciembre en el que no se acuerda de ti ni el Tato? Pues si os fastidia a vosotros, San Urbano, San Valeriano, San Juan de Kety, que estáis más fiambres que el choped del eroski, imaginad a nosotros, los que tenemos que aguantar vivos la milonga televisiva casposa de la Navidad de mis gónadas desde unos días antes cada año, una semana antes por lustro. Y tú no te rías, San Teofredo (18 de noviembre). Pronto llegará tu hora. Y el encargado de La Antenacinco seguirá sin entender nada.
Llamo al Servicio de Atención al Cliente de La Antenacinco. Me atiende un encargado. A partir de ahora las frases impares las dije yo y las pares me las contestó el encargado. Disculpe, ¿estos anuncios...?. ¿A qué se refiere?. ¿Que por qué ponen estos anuncios?. Coño, los anuncios de Navidad. No, no, yo digo los que han puesto hoy, no los que pondrán dentro de veinte días. No le entiendo. Vuelvo al modo narrativo habitual.
Entre el 5 y el 25 de diciembre trancurren veinte días, veinte santos que han quedado sepultados por la Natividad de Nuestro Señor Jesucristo. ¿A que molesta, Santa Leocadia (9 de diciembre)? ¿Pensabas que iba a ser así cuando escribiste "Cántico espiritual", San Juan de la Cruz (14 de diciembre)? ¿Por qué no te moriste en agosto, San Pedro Canisio, en vez de hacerlo un 21 de diciembre en el que no se acuerda de ti ni el Tato? Pues si os fastidia a vosotros, San Urbano, San Valeriano, San Juan de Kety, que estáis más fiambres que el choped del eroski, imaginad a nosotros, los que tenemos que aguantar vivos la milonga televisiva casposa de la Navidad de mis gónadas desde unos días antes cada año, una semana antes por lustro. Y tú no te rías, San Teofredo (18 de noviembre). Pronto llegará tu hora. Y el encargado de La Antenacinco seguirá sin entender nada.
9/12/09
EL COYOTE Y LOS TUDOR
La tercera temporada de “Los Tudor” (Canal +) empieza con la tercera boda de Enrique VIII y terminará con la cuarta, así que veremos cómo les va a Jane Seymour y Ana de Cleves en la corte del rey Enrique. Michael Hirst, guionista de la serie, reconoce que a veces se deja llevar por su imaginación, pero también está convencido de que cuanto más extraordinaria e increíble es una escena, más probablemente debe estar basada en un hecho histórico. Creo que tiene razón. El arte es un pobre imitador de la vida, y la imaginación de los guionistas es incapaz, como le ocurre al Coyote, de dar caza al Correcaminos de la historia. Así que “Los Tudor” es una serie muy bien escrita por un Coyote aplicado, maravillosamente ambientada, fotografiada e interpretada, y con las dosis justas de sexo, política, teología y sangre.
El guapísimo Jonathan Rys-Meyers interpreta a Enrique VIII. ¿Una trampa del Coyote para enganchar a la audiencia? No tanto. La imagen que tenemos de Enrique VIII es la de los retratos en los que el pintor Hans Holbein le inmortalizó como un tipo gordo y con barbita, pero el joven Enrique era, como demuestra su armadura de cuando estaba a punto de cumplir treinta años, un Jonathan Rys-Meyers de 1,85 metros de altura y 91,7 centímetros de cintura. No está mal. Enrique fue un gran deportista (también músico y teólogo) y un gran comilón, pero tras una caída del caballo en un torneo a los cuarenta y cuatro años, que le dejó graves secuelas, dejó de hacer ejercicio, aunque siguió comiendo y engordando hasta necesitar armaduras con un contorno de 1,3 metros. En “Los Tudor”, Enrique VIII aparece muchas veces comiendo, como Brad Pitt en “Ocean´s Eleven”, pero a lo largo de los capítulos difícilmente le veremos engordar, para desesperación de los historiadores.
Jane Seymour, si bien tiene un interesante toque feminista, es un personaje con menos aristas que Ana Bolena, ejecutada en el último capítulo de la segunda temporada. La relación entre Enrique VIII y Ana Bolena cambió el mundo más que la de Paris y Helena, y Ana es un personaje histórico más “televisivo” que Jane. Pero el Coyote seguro que se encarga de mantener el interés de los espectadores a golpe de escenas increíbles y, por lo tanto, históricas. Otra cosa es que consiga alcanzar al Correcaminos
El guapísimo Jonathan Rys-Meyers interpreta a Enrique VIII. ¿Una trampa del Coyote para enganchar a la audiencia? No tanto. La imagen que tenemos de Enrique VIII es la de los retratos en los que el pintor Hans Holbein le inmortalizó como un tipo gordo y con barbita, pero el joven Enrique era, como demuestra su armadura de cuando estaba a punto de cumplir treinta años, un Jonathan Rys-Meyers de 1,85 metros de altura y 91,7 centímetros de cintura. No está mal. Enrique fue un gran deportista (también músico y teólogo) y un gran comilón, pero tras una caída del caballo en un torneo a los cuarenta y cuatro años, que le dejó graves secuelas, dejó de hacer ejercicio, aunque siguió comiendo y engordando hasta necesitar armaduras con un contorno de 1,3 metros. En “Los Tudor”, Enrique VIII aparece muchas veces comiendo, como Brad Pitt en “Ocean´s Eleven”, pero a lo largo de los capítulos difícilmente le veremos engordar, para desesperación de los historiadores.
Jane Seymour, si bien tiene un interesante toque feminista, es un personaje con menos aristas que Ana Bolena, ejecutada en el último capítulo de la segunda temporada. La relación entre Enrique VIII y Ana Bolena cambió el mundo más que la de Paris y Helena, y Ana es un personaje histórico más “televisivo” que Jane. Pero el Coyote seguro que se encarga de mantener el interés de los espectadores a golpe de escenas increíbles y, por lo tanto, históricas. Otra cosa es que consiga alcanzar al Correcaminos
8/12/09
CON GARANTÍA, TE FÍAS
La ciencia no es fiable porque nunca se equivoque, sino porque dispone de mecanismos eficaces para detectar y corregir errores. La democracia no es un buen sistema político porque no cometa injusticias, sino porque dispone de sistemas de control que denuncian las tropelías para castigarlas. ¿Y la tele? ¿Es la tele de fiar? Si en algo coincidimos todos es en que al menos los Call TV son una estafa, un timo, un engañabobos.
Esas horas muertas que antes rellenaban las teletiendas ahora están repletas de concursos trampa que invitan a llamar por teléfono con trampas, hacen esperar con trampas, te hacen preguntas trampa y te dan una respuesta tramposa para no darte un premio que nació entrampado. Si laSexta quisiera dejar de engañar a quienes participan en sus Call TV, debería empezar por eliminar ese “Gana ahora” en el que hace unos días negaron un premio de 60.000 euros a un participante que, ante el estupor de la presentadora del concurso, acertó la respuesta y ganó, pero fue descalificado con malas artes. Pero, vaya, no lo hace.
Lo curioso es que si laSexta quisiera justo lo contrario, o sea, hacer una campaña para promocionar su “Gana ahora” para que confiáramos en él (y dejáramos de considerarlo un timo y nos lanzáramos a participar como tontos), debería hacer justo lo que hizo: fabricar una trampa evidente como la del otro día, darle publicidad para que todos conociéramos que los Call TV no son de fiar (aquí incluiríamos las parodias y denuncias de “Sé lo que hicisteis”), y, después, mostrar al mundo su justa intervención garantizando que el premio iba a pagarse. Moraleja: los Call TV son un timo, pero al menos en laSexta disponen de un mecanismo de vigilancia que detecta los abusos y garantiza que con una llamada de cuatro duros te puedes embolsar un pastón. Habría que ser estúpido para llamar a los Call TV de otras cadenas, con lo fácil que es que te engañen cuando no hay garantías.
7/12/09
DE CHIKILICUATRE A KARMELECUTRE
Tu país te necesita. Es el eslogan con el que RTVE inicia la campaña del próximo Festival de Eurovisión. Y han dado en el clavo. Es un caso de emergencia nacional en el que realmente nuestro país nos necesita. Se trata de asegurar nuestra propia supervivencia como pueblo, nuestro modo de vida, lo que somos. Hemos de dar un paso al frente con valor y determinación.
Tal ardor patriótico no es normal, es verdad, pero está justificado. No somos miembros del G-7, ni del G-8, ni del G-20, y tampoco somos uno de los cinco miembros permanentes (ni siquiera de los diez no permanentes) del Consejo de Seguridad de la ONU. Pero, maldita sea, formamos parte de los Big Four. O sea, somos uno de los cuatro países que, como ponemos una pasta en Eurovisión, tienen asegurada año tras año su participación en la final del Festival. Y eso aunque su representante haya quedado el año anterior en un puesto tan ridículo que obligara a cualquier otro a quedarse en casa lamiendo heridas y descansando del bochorno.
El caso es que RTVE abre un nuevo plazo para presentar candidaturas. Karmele Marchante, ese ente, lleva semanas dando la turra con la suya. No sabe que no tiene la chispa de Chikilicuatre, ni que las bromas, como los chistes, sólo tienen gracia la primera vez. El país nos necesita. Todos debemos presentar nuestra candidatura para anegar la suya entre millones. Cantando si tenemos voz, silbando si tenemos labios, rascando una botella de anís si tenemos manos, tocando el bombo de la batería si tenemos pies. Y, en enero, votando candidaturas como si el Festival ése nos importara algo, cuando lo que queremos es evitar que ese ente que cobija Jorge Javier Vázquez bajo sus alas de gallina clueca lo inunde todo y haga irrespirable vivir aquí. Es nuestro deber, en definitiva, impedir que en sólo dos años pasemos de Chikilicuatre a Karmelecutre.
Tal ardor patriótico no es normal, es verdad, pero está justificado. No somos miembros del G-7, ni del G-8, ni del G-20, y tampoco somos uno de los cinco miembros permanentes (ni siquiera de los diez no permanentes) del Consejo de Seguridad de la ONU. Pero, maldita sea, formamos parte de los Big Four. O sea, somos uno de los cuatro países que, como ponemos una pasta en Eurovisión, tienen asegurada año tras año su participación en la final del Festival. Y eso aunque su representante haya quedado el año anterior en un puesto tan ridículo que obligara a cualquier otro a quedarse en casa lamiendo heridas y descansando del bochorno.
El caso es que RTVE abre un nuevo plazo para presentar candidaturas. Karmele Marchante, ese ente, lleva semanas dando la turra con la suya. No sabe que no tiene la chispa de Chikilicuatre, ni que las bromas, como los chistes, sólo tienen gracia la primera vez. El país nos necesita. Todos debemos presentar nuestra candidatura para anegar la suya entre millones. Cantando si tenemos voz, silbando si tenemos labios, rascando una botella de anís si tenemos manos, tocando el bombo de la batería si tenemos pies. Y, en enero, votando candidaturas como si el Festival ése nos importara algo, cuando lo que queremos es evitar que ese ente que cobija Jorge Javier Vázquez bajo sus alas de gallina clueca lo inunde todo y haga irrespirable vivir aquí. Es nuestro deber, en definitiva, impedir que en sólo dos años pasemos de Chikilicuatre a Karmelecutre.
6/12/09
CRUCIFIJOMANÍA
Crucifijos por todas partes. En recuerdo de quiénes somos y de quiénes no somos. Pero no únicamente en las escuelas públicas. ¿Qué argumento a favor del crucifijo en las escuelas públicas no serviría para apoyar también la implantación del crucifijo en cualquier otro organismo oficial? Crucifijos en los despachos de la Subsecretaría de Fomento Ganadero. Para no olvidar en ningún momento la identidad cultural de Europa, indisociablemente unida al Cristo crucificado. Crucifijos pintados en las lanchas y los helicópteros del Servicio de Guardacostas de la Marina española. Porque la imagen de la cruz va mucho más allá de la religión y es un símbolo universal del sacrificio y la entrega desinteresada a los demás. Crucifijos presidiendo las reuniones de la Comisión Interministerial de Coordinación de la Administración Periférica del Estado. Para respetar a los comisionados que sean católicos. Porque en los países islámicos también lo hacen con sus propios símbolos. Porque si empezamos prohibiendo los crucifijos en las reuniones de la Comisión Interministerial de Coordinación de la Administración Periférica del Estado terminaremos metiendo en la cárcel a los niños que reciban regalos el día de Reyes.
Y crucifijos, por supuesto, en la televisión pública. ¿Qué argumento a favor del crucifijo en las escuelas públicas no serviría para apoyar también la implantación del crucifijo en todas las emisiones de Televisión Española? ¿Quién sería el intolerante al que esto le pudiera molestar? Ana Pastor presentando "Los desayunos de TVE" ante una mesa sobre la que hay un ordenador, un vaso de agua, toda la prensa del día y un crucifijo. "Saber y ganar" en un decorado en el que el título del concurso aparece en letras grandes rodeando un crucifijo. Juan Ramón Lucas entrevistando a Fernando Trueba en "En noches como ésta" con un crucifijo colocado entre ambos. Porque es un símbolo cultural nuestro que trasciende a las creencias y a las religiones. Porque una cosa es un Estado laico y otra muy diferente un Estado laicista radical que atenta contra la libertad religiosa. Porque la verdad nos hará libres.
Y crucifijos, por supuesto, en la televisión pública. ¿Qué argumento a favor del crucifijo en las escuelas públicas no serviría para apoyar también la implantación del crucifijo en todas las emisiones de Televisión Española? ¿Quién sería el intolerante al que esto le pudiera molestar? Ana Pastor presentando "Los desayunos de TVE" ante una mesa sobre la que hay un ordenador, un vaso de agua, toda la prensa del día y un crucifijo. "Saber y ganar" en un decorado en el que el título del concurso aparece en letras grandes rodeando un crucifijo. Juan Ramón Lucas entrevistando a Fernando Trueba en "En noches como ésta" con un crucifijo colocado entre ambos. Porque es un símbolo cultural nuestro que trasciende a las creencias y a las religiones. Porque una cosa es un Estado laico y otra muy diferente un Estado laicista radical que atenta contra la libertad religiosa. Porque la verdad nos hará libres.
5/12/09
SEXTAGATE
Empate. Pero empate empatado del todo. No un empate técnico ni un empate aproximado. No un resultado tan parecido que parece un empate. El enfrentamiento entre Buenafuente y Wyoming que tuvo lugar el pasado jueves en la Sexta terminó con un empate clavado. Se intercambiaron sus respectivos programas por un día y al término del tiempo reglamentario el marcador informaba de un empate exacto: cada uno condujo el espacio de su rival con la misma brillantez que el otro y con la misma brillantez con la que conduce su espacio propio a diario. El juez de silla pidió el ojo de halcón: empate. Se recurrió a la foto finish: igualdad absoluta en el momento en que las barbillas de ambos showmen cruzan la línea de meta. Empate irresoluble.
Tan irresoluble, tan igualado que ya ha empezado a circular todo tipo de rumores por la red. Uno de los más comentados asegura que en realidad "El intermedio" lo presentó Wyoming y Buenafuente presentó "Buenafuente", aunque gracias a efectos especiales por ordenador se sobreimpresionó todo el rato la cara del presentador visitante sobre el cuerpo del presentador local. Al parecer un internauta robó 14.000 emails que se intercambiaron estos días Andréu y Elgrán en donde esto queda probado. También se habla de una red de apuestas ilegales en la que los propios presentadores habrían empeñado sus dineros apostando por un empate que resultaría haber estado amañado. Y en ciertos foros se asegura que escuchas ilegales realizadas por el mismísimo Rubalcaba con el sistema Sitel desvelan que Andréu Buenafuente y el Gran Wyoming son en verdad la misma persona, que de lunes a jueves presenta a las 9 "El intermedio" en Madrid y luego viaja en avión privado a Barcelona para presentar el late night de la Sexta.
Tengan razón unos u otros, está claro que ha estallado el Sextagate. Y puestos a pensar en conspiraciones, ¿habrá sido la maravillosa noche del jueves una tapadera para evitar que se siga hablando del escándalo del call tv de la cadena verdiblanca?
Tan irresoluble, tan igualado que ya ha empezado a circular todo tipo de rumores por la red. Uno de los más comentados asegura que en realidad "El intermedio" lo presentó Wyoming y Buenafuente presentó "Buenafuente", aunque gracias a efectos especiales por ordenador se sobreimpresionó todo el rato la cara del presentador visitante sobre el cuerpo del presentador local. Al parecer un internauta robó 14.000 emails que se intercambiaron estos días Andréu y Elgrán en donde esto queda probado. También se habla de una red de apuestas ilegales en la que los propios presentadores habrían empeñado sus dineros apostando por un empate que resultaría haber estado amañado. Y en ciertos foros se asegura que escuchas ilegales realizadas por el mismísimo Rubalcaba con el sistema Sitel desvelan que Andréu Buenafuente y el Gran Wyoming son en verdad la misma persona, que de lunes a jueves presenta a las 9 "El intermedio" en Madrid y luego viaja en avión privado a Barcelona para presentar el late night de la Sexta.
Tengan razón unos u otros, está claro que ha estallado el Sextagate. Y puestos a pensar en conspiraciones, ¿habrá sido la maravillosa noche del jueves una tapadera para evitar que se siga hablando del escándalo del call tv de la cadena verdiblanca?
4/12/09
EL INFLAMADO DE MOE
A por ellos. Queremos saber sus nombres, ver sus caras en la tele, perseguirlos sin descanso. Para que aprendan. Porque no basta con pedir perdón para olvidar lo que ha pasado. Han destrozado la vida de ese pobre hombre falsamente acusado de maltratar, violar y matar a su hijastra de tres años. Ojo por ojo. El que la hace, la paga. El que a hierro mata, a hierro muere. No la hagas, no la temas.
Supongo que me habrán reconocido. Soy Moe Szyslak y estoy aquí porque aproveché un descuido de Antena 3 para escaparme de la taberna en la que vendo cerveza Duff a Homer Simpson. Sé que esto es irregular porque ahora mismo debería estar en mi taberna por si suena el teléfono y preguntan por Estoyca Chondo o Donpi Topocho. Pero, ya ven, estaba viendo por el rabillo del ojo cómo se formaba un tumulto justiciero y no supe resistirme. Así soy yo: tumulto justiciero veo, tumulto justiciero quiero. Es que no me dio tiempo ni a quitarme el mandilón. Lo importante es que traigo mi escopeta y estoy dispuesto a perseguir a todos esos que tan alegremente acusaron, juzgaron y condenaron a un inocente.
El tumulto es la máxima expresión de la soberanía popular. Para hacer justicia perseguiremos a todos, da igual que sean médicos o policías. Y queremos que la tele dé los nombres y muestre las imágenes de los culpables. Que sean condenados a pena de telediario y todos lo veamos. Y que esos magacines matinales que confunden la información con el escarnio sean perseguidos, acorralados y vilipendiados en directo por sus propios programas para que así los espectadores lo veamos y estemos informados. Esta horda de ciudadanos que me sigue con palos y antorchas quiere lo mismo que yo: dar un escarmiento a los culpables, esa horda de salvajes que hace unos días se saltaron la presunción de inocencia y persiguieron con palos y antorchas a quien todos sabíamos culpable y queríamos dar un escarmiento.
Supongo que me habrán reconocido. Soy Moe Szyslak y estoy aquí porque aproveché un descuido de Antena 3 para escaparme de la taberna en la que vendo cerveza Duff a Homer Simpson. Sé que esto es irregular porque ahora mismo debería estar en mi taberna por si suena el teléfono y preguntan por Estoyca Chondo o Donpi Topocho. Pero, ya ven, estaba viendo por el rabillo del ojo cómo se formaba un tumulto justiciero y no supe resistirme. Así soy yo: tumulto justiciero veo, tumulto justiciero quiero. Es que no me dio tiempo ni a quitarme el mandilón. Lo importante es que traigo mi escopeta y estoy dispuesto a perseguir a todos esos que tan alegremente acusaron, juzgaron y condenaron a un inocente.
El tumulto es la máxima expresión de la soberanía popular. Para hacer justicia perseguiremos a todos, da igual que sean médicos o policías. Y queremos que la tele dé los nombres y muestre las imágenes de los culpables. Que sean condenados a pena de telediario y todos lo veamos. Y que esos magacines matinales que confunden la información con el escarnio sean perseguidos, acorralados y vilipendiados en directo por sus propios programas para que así los espectadores lo veamos y estemos informados. Esta horda de ciudadanos que me sigue con palos y antorchas quiere lo mismo que yo: dar un escarmiento a los culpables, esa horda de salvajes que hace unos días se saltaron la presunción de inocencia y persiguieron con palos y antorchas a quien todos sabíamos culpable y queríamos dar un escarmiento.
3/12/09
CONDONES Y PROFILÁCTICOS
Uno de diciembre y la tele se pone un año más el lazo rojo en la solapa. El Día mundial del sida nos recuerda que el VIH sigue ahí. Los informativos le hacen un hueco en su escaleta, dan el lema de este año y actualizan cifras. Pero hay cosas que no cambian. Sigue habiendo gente mal informada que no trabajaría en una empresa donde hubiera un contagiado por el VIH. Y sigue habiendo gente mal informada que no sabe que está contagiada. O sea, que sigue habiendo personas doblemente mal informadas que no trabajarían en una empresa donde trabajan ellas mismas. También hubo nazis judíos.
Y hay otra cosa que tampoco cambia. Sigue dándose la puñetera coincidencia de que el mejor método que existe para prevenir el contagio de VIH al mantener relaciones sexuales es una funda elástica (llamémosla “profiláctico”) que es, también, un método anticonceptivo (llamémoslo “condón”). Como, según la Iglesia, el condón ya era pecado cuando llegó el sida, resulta que el profiláctico nació en pecado original y no hay bautismo ni encíclica que limpie eso.
Estaría bien que los telediarios pudieran informar de que los profilácticos, utilizados tras la menopausia o durante el embarazo (libres por tanto de su estigma anticonceptivo), ya no son pecado. Pero eso, ay, obligaría a aceptar su eficacia como medida preventiva. Así que, por desgracia, esa noticia no llega. Quienes deberían dar ese paso tan lógico pensarán, y con razón, que íbamos a malacostumbrarnos y después preferiríamos barbaridades como el reparto de preservativos entre pecadores sanos antes que tener miles de contagiados enterrados que van derechitos al cielo en gracia de Dios. Porque en los países ricos tenemos medicamentos para que el sida ya no nos mate, pero en muchos lugares del mundo el sida aún es una condena a muerte. Y eso tampoco se entiende: antes los que se apartaban de la ortodoxia eran los condenados, ahora son los que viven –vivimos– sanos y felices.
Y hay otra cosa que tampoco cambia. Sigue dándose la puñetera coincidencia de que el mejor método que existe para prevenir el contagio de VIH al mantener relaciones sexuales es una funda elástica (llamémosla “profiláctico”) que es, también, un método anticonceptivo (llamémoslo “condón”). Como, según la Iglesia, el condón ya era pecado cuando llegó el sida, resulta que el profiláctico nació en pecado original y no hay bautismo ni encíclica que limpie eso.
Estaría bien que los telediarios pudieran informar de que los profilácticos, utilizados tras la menopausia o durante el embarazo (libres por tanto de su estigma anticonceptivo), ya no son pecado. Pero eso, ay, obligaría a aceptar su eficacia como medida preventiva. Así que, por desgracia, esa noticia no llega. Quienes deberían dar ese paso tan lógico pensarán, y con razón, que íbamos a malacostumbrarnos y después preferiríamos barbaridades como el reparto de preservativos entre pecadores sanos antes que tener miles de contagiados enterrados que van derechitos al cielo en gracia de Dios. Porque en los países ricos tenemos medicamentos para que el sida ya no nos mate, pero en muchos lugares del mundo el sida aún es una condena a muerte. Y eso tampoco se entiende: antes los que se apartaban de la ortodoxia eran los condenados, ahora son los que viven –vivimos– sanos y felices.
2/12/09
EL DISEÑO Y EL DESTINO
Cada noticia de cada telediario está diseñada (pero no destinada) para ser desmontada por la noticia posterior, por lo que cuando llega la información deportiva es casi imposible recordar nada. La torre Eiffel, construida para la Exposición Universal de 1889, sin embargo, estaba destinada (pero no diseñada) a desaparecer, pero finalmente se salvó, y ahí está viendo pasar el tiempo. Esto quiere decir que los telediarios diseñan sus contenidos de tal manera que una noticia sobre el divorcio de no sé qué infanta es capaz de sepultar el penúltimo atentado suicida en Irak, a pesar de que la información sobre el atentado suicida estaba destinada a durar más allá del fin de esa Exposición Universal. La torre Eiffel tuvo mucha más suerte que la guerra de Irak, aunque la torre nació para ser desmontada y la guerra para ser montada.
No sé si cambiar el orden de las noticias serviría de algo. Primero, los deportes y el tiempo. Al final, Irak y el escándalo doméstico que toque. La semana pasada, hasta los futboleros más futboleros terminamos hasta el gorro del partido Barça-Madrid, de la metafísica alrededor de Messi y de la física en torno a Ronaldo. El sábado, por ejemplo, el telediario de TVE-1 mostró durísimas imágenes de mujeres y niñas de la India quemadas con ácido por sus maridos y padres. Estoy convencido de que esas imágenes estaban destinadas a cambiar la vida de cualquier espectador con dos dedos de frente ética, pero el diseño del telediario se encargó de que olvidáramos el ácido a golpe de frivolidad y fútbol. Es cierto que, de vez en cuando, una noticia que nació para ser un adorno efímero en una Exposición Universal se queda con nosotros para siempre, pero no será el caso de las mujeres desfiguradas de la India. Como quiero seguir confiando en la naturaleza televisiva, quiero también creer que el problema de los telediarios no está en el destino de las noticias, sino en el diseño.
A lo mejor Luis Landero tiene razón y algún día el mundo estará gobernado por los poetas y a nadie le faltará nada, como a los pájaros. Mientras esperamos la llegada de los poetas, al mundo le hacen falta muchas cosas y necesitamos telediarios que lo digan en voz alta y que conviertan el ácido arrojado a la cara de una mujer en la torre Eiffel, es decir, en un monumento permanente.
No sé si cambiar el orden de las noticias serviría de algo. Primero, los deportes y el tiempo. Al final, Irak y el escándalo doméstico que toque. La semana pasada, hasta los futboleros más futboleros terminamos hasta el gorro del partido Barça-Madrid, de la metafísica alrededor de Messi y de la física en torno a Ronaldo. El sábado, por ejemplo, el telediario de TVE-1 mostró durísimas imágenes de mujeres y niñas de la India quemadas con ácido por sus maridos y padres. Estoy convencido de que esas imágenes estaban destinadas a cambiar la vida de cualquier espectador con dos dedos de frente ética, pero el diseño del telediario se encargó de que olvidáramos el ácido a golpe de frivolidad y fútbol. Es cierto que, de vez en cuando, una noticia que nació para ser un adorno efímero en una Exposición Universal se queda con nosotros para siempre, pero no será el caso de las mujeres desfiguradas de la India. Como quiero seguir confiando en la naturaleza televisiva, quiero también creer que el problema de los telediarios no está en el destino de las noticias, sino en el diseño.
A lo mejor Luis Landero tiene razón y algún día el mundo estará gobernado por los poetas y a nadie le faltará nada, como a los pájaros. Mientras esperamos la llegada de los poetas, al mundo le hacen falta muchas cosas y necesitamos telediarios que lo digan en voz alta y que conviertan el ácido arrojado a la cara de una mujer en la torre Eiffel, es decir, en un monumento permanente.
1/12/09
FÁBRICAS DE REALIDAD
¿Qué ocurriría si un día no se produjera ninguna noticia? No es tan inverosímil pensar que pudiera darse ese caso: un día cualquiera no ocurre nada especialmente destacado en la política nacional. Ni en la internacional. Ni en la guerra ni en los deportes. Ni en el mundo del espectáculo. Nadie hace ninguna declaración polémica. La meteorología no registra ningún suceso extremo. No hay elecciones cerca. El Parlamento no registra ninguna actividad significativa. ¿Qué harían ese día Ana Blanco y Pepa Bueno? ¿Iniciaría su informativo Matías Prats diciendo "Buenas noches, hoy no tenemos nada especial que contarles. No ha llegado ninguna noticia a nuestra redacción. Así que hoy no habrá ‘Antena 3 Noticias 2’ y les dejamos ahora con una selección de las mejores escenas de ‘Doctor Mateo’"? ¿Y Gabilondo? ¿Suspendería Telecinco su telediario si un día no hubiera ningún asesinato truculento ni ningún episodio de delincuencia callejera? ¿Olvidarían los periodistas su feroz competencia por la audiencia para reconocer con normalidad que ese día no tienen asuntos de los que ocuparse?
No, ¿verdad? Si quieren que sus telediarios sean vistos con seriedad por los espectadores, las cadenas de televisión están obligadas a fabricar un número fijo de horas de realidad al día independientemente de la materia prima con la que se manejen. Los informativos tienen una duración constante de lunes a viernes, como si el mundo trabajara para ellos, de igual manera que las empresas chacineras producen sus embutidos de forma pautada. ¿Y si ese día sin noticias ya hubiera ocurrido alguna vez? Es más, ¿y si ese día sin noticias ocurriera con cierta frecuencia? Piensen en una redacción de informativos que ha de rellenar un tiempo fijo de contenidos y teme perder audiencia ante sus rivales: ¿se imaginan el alivio que deben de sentir los periodistas cuando un día de pocas noticias llega una nota que señala que quizá haya habido un caso de maltrato infantil en Tenerife con resultado de muerte de la menor? ¿Se imaginan cómo actuarán?
No, ¿verdad? Si quieren que sus telediarios sean vistos con seriedad por los espectadores, las cadenas de televisión están obligadas a fabricar un número fijo de horas de realidad al día independientemente de la materia prima con la que se manejen. Los informativos tienen una duración constante de lunes a viernes, como si el mundo trabajara para ellos, de igual manera que las empresas chacineras producen sus embutidos de forma pautada. ¿Y si ese día sin noticias ya hubiera ocurrido alguna vez? Es más, ¿y si ese día sin noticias ocurriera con cierta frecuencia? Piensen en una redacción de informativos que ha de rellenar un tiempo fijo de contenidos y teme perder audiencia ante sus rivales: ¿se imaginan el alivio que deben de sentir los periodistas cuando un día de pocas noticias llega una nota que señala que quizá haya habido un caso de maltrato infantil en Tenerife con resultado de muerte de la menor? ¿Se imaginan cómo actuarán?
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