19/1/20

ESPAÑOLES, LA TELE... NO HA MUERTO


El estreno de “Sánchez y Carbonell” la noche del jueves en La 2 estuvo lleno de trampas, todas hechas con el material más resistente que la humanidad conoce, la nostalgia. No fue, sin embargo, uno de esos programas moñas en los que la gente se pone pesada hablando de los viejos tiempos, sonríe con una mirada bobalicona y aburre a las piedras. “Sánchez y Carbonell” fue un programa nostálgico sin pretenderlo porque trató de ser un programa de televisión con todas las letras, y no se puede hacer televisión —ni ninguna otra actividad humana, claro— sin tener en cuenta su historia.

Y qué grandes fueron las trampas que usaron. Fue trampa el homenaje al gran maestro José María Íñigo, a “Directísimo”, al gran timador Uri Geller, a la gran artistaza Lola Flores, al dadaísta comunicado de Arias Navarro, a los estudios Buñuel (desgraciadamente destruidos sin que nadie pague por tamaña tropelía), a “La bola de cristal”, al inolvidable Pedro Reyes (¡viva Pedro Reyes!), a “El peor programa de la semana” (al que tanto nos recuerda), incluso, y sin pretenderlo, al “Un, dos, tres, responda otra vez” a través del supuesto cascote rescatado de los estudios Buñuel, hecho de cartón piedra igual que tantos decorados del mítico concurso.

Aquel falso cascote, al que bromeando llamaban “el formato”, servía a “Sánchez y Carbonell” de conexión con los anteriores “Alaska y Segura”, “Alaska y Coronas”, “Torres y Reyes” y, en fin, la historia de la televisión, que es nuestra historia. Qué gran homenaje a la tele es decir que las caras cambian, pero los formatos permanecen. Al final, el público votó que Elena Sánchez y Pablo Carbonell reprodujeran en el plató el gran momento en el que La Faraona perdió un pendiente en el fragor del directo, y no el comunicado de Arias Navarro. Sin embargo, nos fuimos a la cama con aquel histórico mensaje resonando en nuestras cabezas, aunque, después de tantas emociones, con un importante cambio: “Españoles, la televisión… no ha muerto”. La semana que viene, más.

No hay comentarios: