Hablar a la ligera es fácil. Por
ejemplo, el otro día Celia Villalobos
contó en “Espejo público” quiénes la abuchearon junto al parlamento andaluz: “Eran gente de Podemos, por su aspecto
físico y las cosas que decían”. ¿Ven qué fácil? Pero hablar a la ligera también
puede ser divertido. Por ejemplo, se puede responder a Villalobos que con las
cosas que dice tiene toda la pinta de ser una de esas personas que juzga a los
demás por la pinta. Muy bien, ahora solo tenemos que saber dónde parar antes de
que nadie resulte herido.
Hace nada, Chelo García Cortés, habitual de “Sálvame”, protagonizó una de esas
tormentas en un vaso de agua marca de la casa. Acusaciones, reproches,
amenazas, lloros, demandas, espantadas del escenario y esas cosas. Pura rutina.
Argumentaba que estaba harta de que se hablara de su sexualidad y de su vida
privada tan a la ligera. ¿Buscaba una revolución, el fin de “Sálvame”, un
cambio de paradigma en Telecinco? No. Quería dinero: “Si quieres que hable de mi vida privada llévame al 'Sálvame deluxe',
no pienso hablar gratis”.
Jorge Javier Vázquez había estado en aquel teatrillo muerto de risa
pinchando a Chelo, pero después se puso serio en “Gran hermano”. Le parecía que
allí abordaban la drogadicción y posterior desintoxicación de Paquirrín demasiado a la ligera. Explicó
la importancia de este asunto en la vida de Paquirrín poniéndose a sí mismo de
ejemplo: las drogas marcaban la vida de Paquirrín igual que la homosexualidad
había marcado la suya. Ahora, claro, ya no se reía al hablar de sexualidad. ¿Sabe
Jorgeja cuándo se puede hablar a la ligera y cuándo hay que parar?
Ante la inminencia del rescate de
Julen en Totalán, “Sálvame” sumó a
sus tonterías habituales el rescate del niño. ¿Está mal abordar este asunto en
un programa que todo lo trata tan a la ligera, o lo que está mal es que no aborde
más a menudo temas de más peso? Da igual lo que diga Jorgeja, es Chelo la que
sabe: en la tele, el límite de la frivolidad lo marca el dinero, y en “Sálvame”
nunca se toman a la ligera un asunto de tanto peso.
¡Qué cansino con la telecinco!
ResponderEliminar