Atención: hay cambios en la respuesta que debemos dar cuando nos pregunten qué nos gusta de la tele. Para ser guays ahora no hay que decir que vemos los documentales de animales de La 2. No es que eso no cuele, que no coló nunca, es que eso ya pasó a la historia y solo lo dicen los viejunos que todavía usan el teletexto. Ahora lo que pita es decir que lo que te gusta ver en la tele son programas de ciencia. “Es que yo en la tele solo veo programas de ciencia”: es evidente que tampoco cuela, pero ¿veis cómo mola?
Según la VII Encuesta de Percepción Social de la Ciencia
dada a conocer estos días por la Fundación Española para la Ciencia y la
Tecnología (FECYT), los españoles seremos muy burros, vale, pero mantenemos un
alto interés por la ciencia, siendo, además, las profesiones de médico y de
científico las más valoradas. Moraleja: vale la pena buscar el beneplácito
social dándoselas de consumidor de programas científicos, pero hay que hacerlo
con cuidado, no vaya a ser que alguien te pregunte cuáles. Según la encuesta de
la FICYT, los españoles percibimos un creciente déficit de información
científica, o sea una creciente diferencia entre el alto grado de interés que
tenemos y el bajo nivel de información que se nos ofrece. Por ejemplo, tras el
fin de “Órbita Laika” en La 2 (y mientras esperamos como agua de mayo su
segunda temporada), en TVE no hay programas dedicados íntegramente a la
ciencia.
Manuel Toharia,
divulgador científico que fue hace años hombre del tiempo en la tele, se
lamentaba el otro día en “No es un día cualquiera”, de RNE, porque el Estado
dedica recursos para que los estudiantes aprendan, pero ya abandonado el sistema
educativo “y hasta que te mueras, nadie
te enseña ya nada, nada, de lo nuevo que va ocurriendo, que es constante”.
Así que pongámonos guays diciendo que en la tele nos gusta ver ciencia, pero
recemos para que nadie nos pregunte qué programas son esos y a qué hora se
emiten.
Es que de verdad hay gente a la que le gusta la ciencia y quiere saber, pero lo que echan hoy por la tele no vale un duro. La inmensísima mayoría de "documentales" son americanadas sin chicha ni limoná, que se preocupan más por sacar a supuestos científicos diciendo americanadas ("wow! el universo es fascinante!") que por explicar bien las cosas y ahondar en el tema que traten. Y cuando no, son directamente tonterías inventadas como ese tan famoso de las sirenas.
ResponderEliminarLo primero sería ver a qué llamamos programas sobre ciencia, porque yo no incluiría ahí nada de lo que se emite en Discovery Max y similares.