Los amantes de los documentales sobre naturaleza salvaje están hoy de enhorabuena. Nada más empezar el día, a las siete de la mañana, La 2 emite un apasionante reportaje sobre los colibríes, esas pequeñas aves capaces de mantenerse en el aire flotando sin desplazarse gracias a su portentosa frecuencia de batido de alas; hacen falta cámaras de alta velocidad para desentrañar la magia que despliegan en sus vuelos. Después, a las doce menos veinte, serán los elefantes los protagonistas de un documental centrado en las migraciones de estos paquidermos en busca del agua y en la complejidad social de sus manadas, articulada alrededor de los liderazgos en los grupos y en la diferenciación sexual. Los bosques de los manglares protagonizarán el siguiente espacio, con imágenes verdaderamente sorprendentes de la interacción que se establece entre árboles y animales, dados los seres anfibios y acuáticos que viven en las raíces sumergidas de aquéllos, y las aves y mamíferos que habitan en sus copas. A las cuatro, “Grandes documentales” se dedicará a las hormigas, centrando la atención en su organización social en colonias y en su carácter de “animal colectivo” a través de una estructura social extremadamente sofisticada. Una hora después la misma cadena nos hablará de los cambios en la flora y la fauna de la península ibérica con motivo de la llegada de la primavera.
Y a las diez de la noche Telecinco, en la que es su primera incursión de producción propia en este género, nos ofrecerá “Así soy yo”, un programa documental en el que se nos mostrará la vida cotidiana de Kiko Rivera, con imágenes impactantes de su labor como dilléi, otras secuencias que se han conseguido filmar de su estilo de vida fuera de la pista de las discotecas, e incluso declaraciones de un indudable valor naturalista en la que asegura que ser dilléi es más duro de lo que parece, ya que además de pinchar la música hay que coger aviones, meterse kilómetros de coche y hacerse fotos.
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