(Esta columna está dedicada al gran Pepe Colubi por dos motivos: el primero, como representación de todos los autores que dimitieron de "El jueves" tras el vergonzoso episodio de autocensura promonárquica y que ahora han realizado el imprescindible "Orgullo y satisfacción"; el segundo, dado el tema chorromoquero de esta entrada, es obvio.)
Es fascinante el paralelismo existente durante las últimas semanas entre la cobertura televisiva de la sucesión borbónica y las fases de la respuesta sexual humana según fueron descritas por Masters y Johnson en los años 60.
1. Fase de excitación: es un momento en el que un estímulo desencadena el deseo sexual. En los varones el pene se endurece, en las mujeres la vagina se lubrica. Es una fase de estimulación que provoca una respuesta sexual rápida e intensa, pero que está lejos de alcanzar la culminación del acto sexual. El 2 de junio el rey Juan Carlos I anunció su abdicación y todos los departamentos de informativos de las cadenas de este país entraron en fase de excitación. A partir de ese momento la respuesta monárquica de todos los telediarios aumentó de forma rápida e intensa.
2. Fase de meseta: una vez alcanzado el nivel de la fase anterior, éste se mantiene durante un tiempo incrementándose con mucha más lentitud. La respiración se entrecorta, aparece sensación de calor o presión en la pelvis. Las areolas aumentan de tamaño, la vagina se expande. La respuesta sexual se mantiene básicamente estable o en ligero aumento. Entre el 4 y el 17 de junio la cobertura televisiva de la sucesión monárquica estuvo en fase de meseta, manteniendo alto pero constante su nivel de excitación monárquica.
3. Fase de orgasmo: es el momento agudo en el que la respuesta sexual alcanza su nivel más alto. Las pulsaciones cardíacas y la frecuencia respiratoria llegan a sus valores máximos. Se produce la eyaculación. Pueden aparecer gritos, gemidos, risas, llantos, contracciones musculares y agitación general. El orgasmo televisivo de la coronación de Felipe VI tuvo lugar ayer.
4. Fase de resolución: tras el orgasmo, el organismo recupera su estado normal. En el caso de los varones aparece un periodo refractario de duración variable en el que es imposible volver a entrar en la fase de excitación. A partir de hoy los informativos iniciarán un largo periodo refractario en el que no hablarán en absoluto del nuevo rey con el que nos han vuelto a joder. Por favor, por favor, por favor. Déjennos al menos echar tranquilos el cigarrito de después.
http://www.ivoox.com/respuesta-borbonica-humana-antonio-rico-voz-audios-mp3_rf_3243656_1.html
ResponderEliminarLa versión radiofónica de este artículo por www.laboratorioderadio.com
Pues parece que los medios de comunicación no se han enterado de la existencia de esa fase 4. ¡Qué pesados intentando vendernos lo bueno que va a ser que Felipe VI sea rey de España!
ResponderEliminar