Todos los años triunfa un engendro veraniego y este año le tocó a “Arena Mix”. Parece que los telespectadores queremos ver cómo vivimos la vida loca, así que Antena 3 nos la continuará enseñando los jueves por la noche prolongando el programa con otro nombre. Ahora se llamará “LaNoche Mix”. El “Mix” para que se sepa que sigue siendo la misma tontería, y “LaNoche”, así, todo junto, para que se vea que es moderno, rompedor y vive al límite poniendo nervioso al corrector ortográfico de Windows. Jo, qué pasada, tío.
Christian Poveda también se empeñó en mostrar al mundo cómo viven la vida loca los pandilleros en El Salvador. Parece que su iniciativa no fue tan bien acogida como “Arena Mix”, así que en vez de recibir una oferta para continuar con su tarea por parte de Antena 3, recibió unos cuantos balazos que le causaron la muerte. Resulta desconcertante porque, en cierta medida, estos balazos nos confirman que el documental “La vida loca” de Poveda había acertado en su cometido más que “Arena Mix” en el suyo. No todo lo pueden medir los índices de audiencia.
Aquí lamentamos el modo en que ambos han alcanzado el éxito, pero preferimos el de “Arena Mix”. Podrá seguir rellenando horas y horas de televisión que sólo cuestan cuatro duros y permiten a los espectadores alarmarse de forma complaciente y escandalizarse con equidistancia entre la reprobación y la envidia. Botellones, discotecas de ambiente, baile, fauna variada, sexo, droga y cada vez menos rock and roll. El dudoso privilegio de ver la cantera de la que se extraen los participantes de “Mujeres y hombre y viceversa”. Quien tenga la paciencia de verlo podrá, si quiere, llevarse las manos a la cabeza, pero eso es todo. Los autores de “LaNoche Mix” pueden pasear tranquilos porque, enseñando la vida loca que enseñan, los únicos disparos que deben temer son los del mando a distancia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario