Ufff, por los pelos. Suerte que recomenzó ya "Quién quiere ser millonario" en Antena 3, porque si la vuelta del concurso llega a retrasarse un par de semanas más nos hubieran expulsado de la Confederación Televisiva Intergaláctica. La CTI es un organismo de altísimo nivel que agrupa a todos los países de la Vía Láctea de cara a un proceso de convergencia cósmica que ponga las bases de un futuro universo televisivo unificado a través de la TDT. La pertenencia de un país a la CTI le une al grupo de cabeza en la vanguardia de la Historia, pero requiere una serie de requisitos de cuyo incumplimiento se pueden derivar importantes sanciones. Todo miembro de la CTI ha de (1) emitir una versión local de "Betty, la fea", (2) enviar canciones espantosamente feas a festivales internacionales y después poner excusas cuando se quede en penúltimo lugar, (3) emitir de madrugada una teletienda en la que se ensalcen las virtudes de un escurridor de ensaladas de huevo, y (4) programar una edición local de QQSM exactamente igual a la que se emite en el resto de la Confederación hasta en sus más pequeños detalles.
De hecho, la Declaración de Casiopea que siguió al Acuerdo de Alfa Centauri confeccionó un Convenio Regulador Convergente de QQSM en donde se recogen los elementos que deben ser respetados para obtener la homologación. El concursante ha de sentarse a la izquierda, el presentador a la derecha. Las opciones de respuesta deben aparecer en hexágonos alargados de color azul dispuestos en un diseño de 2x2. El presentador ha de ser rajón, hierático, elegantemente coñón y estirar cada pregunta seis veces más de lo que haría falta. Y así hasta más de 4000 requisitos imprescindibles para pertenecer a la CTI. España llevaba casi año y medio sin QQSM. Quince días más de retraso en el reestreno y hubiéramos sido eliminados de la CTI justo en el momento en el que comienza la campaña electoral para la elección de su nuevo parlamento.
2 comentarios:
me gusta este blog! casi siempre consigue q me ría en algún punto de la entrada.. aunq tengo q decir q la de hoy es un poco... ¿abstracta? Con algo de confianza lo llamaría "ida de olla" jajaa pero aún así no dejaría de ser cierto q cada vez falta más imaginación para crear programas de tv. Recuerdo estar en Italia y ver "Pasaparole"... muy triste todo..:D
un saludo!
Y mira que la cosa podría hasta tener su gracia, si no fuera por ese detallito de nada: "El presentador ha de ser rajón, hierático, elegantemente coñón y estirar cada pregunta seis veces más de lo que haría falta.
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