Desde el siglo XVIII estamos convencidos de que la humanidad progresa. Creemos que la ciencia hace posible un progreso tecnológico evidente y que la razón humana produce un progreso moral igual de incuestionable. Y puede que sea verdad. En el siglo XVIII la mano de obra esclava viajaba en barcos de vela. Los emprendedores de la época se rompían la cabeza buscando la manera de cargar la mayor cantidad de ganado humano en las bodegas. Aún se conservan las imágenes que indicaban cómo aprovechar cada palmo disponible colocando esclavos tumbados hasta en el último rincón. Cada muerte suponía una pérdida económica que había que evitar.
En los últimos 20 años murieron intentando llegar a Europa más de 13.000 africanos en el Mediterráneo, quién sabe en el Atlántico. El progreso tecnológico hace posible que los barcos de vela hayan sido sustituidos por barcazas con motor de gasoil. El progreso moral permite que la mano de obra esclava sea la que se pague el viaje y mejore el aprovechamiento del espacio disponible hasta límites que ningún negrero hubiera imaginado. Sus muertes ya no suponen ninguna pérdida económica. Los cuerpos que el oleaje arrastra hasta los telediarios nos incomodan pero deberíamos alegrarnos porque confirman que la humanidad progresa adecuadamente.
5 comentarios:
Llamar barcazas a los tablones con vías de agua por todos lados que traen a los inmigrantes a Europa es mucho decir; habría que llamarlas ataúdes. Por lo demás, las noticias de ese estilo incomodan, por eso cada vez ocupan menos tiempo en el telediario. Parece como si quisieran hacernos pensar que esas tragedias suceden muy lejos de aquí.
Muchos pescadores españoles han dado ejemplo de lo que es un ser humano, y no una bolsa de vísceras, cuando han recogido a náufragos de pateras y cayucos que llevaban días agarrados a una narsa antes la indiferencia de cargueros y yates que pasaron. Cuando uno escucha a Bossi proponer que se bombardeen las pateras, me pregunto qué hacemos que no exigimos la expulsión de Italia de cualquier ámbito decente. Dentro de nada, la solución a la inmigración ilegal será vallar y electrificar las fronteras de los países de donde proceden... Rayos, si eso ya los hacemos en Ceuta y Melilla! Nada, nada, los españoles, como siempre, a la cabeza del progreso en inventos humanitarios: campos de concentración, fronteras valladas...
Si esto es progreso, que se paren, que me bajo.
Saludos!
me preocupa leer esto, dejando 3 minutos la serie que estaba viendo, sentirme mal otro minuto por formar parte de esta "sociedad" que observa desde el sofá, cerrar la pagina y seguir en el minuto 24 de mi serie americana.
Ay Antonio qué deconsiderado por tu parte, de verdad. ¿No te das cuenta de que sólo vienen a robarnos al trabajo? Además ese viaje para ellos es como un crucero de placer, de estos que se ofertan en la zona de viajes de El Corte Inglés por el módico precio de 3.500 € (mínimo).
Anda deja de dedicarles columnas y aprovecha tu tiempo en algo más interesante como el último corte de pelo Julián Muñoz, que es lo que todos queremos leer y ver en el telediario.
Nos presentan conflictos y guerras como algo lejano, para que, cuando alguno de estos nos pille cerca, puedan legitimar sus barbaridades en defensa de sus intereses. Como siempre, la ficción es un mero juguete en manos de la realidad.
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